Las pymes industriales condenaron los aumentos de tarifas y reclamaron resarcimientos a las empresas que explotan los servicios en el país y que se benefician por los aumentos sin realizar desembolsos de inversiones para mejorar la calidad de la prestación.
El titular de Industriales Pymes de Argentina (IPA) Daniel Rosato, reclamó a las compañía del sector eléctrico: «Tienen que hacer las inversiones. Se están aumentando las tarifas en forma sostenible, en dólares y sin nada a cambio.
En diálogo con el programa Tu conexión de los lunes, que se transmite por Radio Led, el empresario puso la mira en las autoridades que nos dicen que las pymes debemos tener competitividad, pero hay empresas que exportan el 90% de lo que producen y les cortan la luz, por lo que no pueden seguir su trabajo y encima les aumentan en dólares», explicó.
Además, las pymes industriales no pueden aumentar los precios, sostuvo el titular de IPA: «Al contrario, bajamos los precios y tratamos de pagar salarios y competir. Es una guerra interna lo que está ocurriendo hoy en el mercado, definió.
Para contrarrestar la situación, las empresas pujan por «una ley o decreto para que no se aumente más la energía por un año. Las empresas, agregó «no pueden pretender hacer inversiones a costa de aumentar a la gente».
«Estamos con reuniones en el Gobierno; queremos llevar al Congreso un proyecto de seguro que deban tener las empresas de energía que hoy no dan ningún resarcimiento, agregó.
Apoyo de la CAME
La Cámara de la Mediana Empresa (CAME), que reúne empresas de todos los sectores de la economía incluyendo al industrial, se alinearon detrás del presidente Mauricio Macri y pidieron que las provincias bajen los impuestos que pueden llegar a explicar hasta el 50% del valor de la factura, señaló la entidad por medio de un comunicado oficial.
El mensaje de la central empresaria señaló que si se toman las boletas de luz y gas de todo el país, en la mayoría la carga tributaria promedia el 30%, pero alcanzando máximos de hasta 50%.
Algunos, agregó la fuente son impuestos visibles y conocidos, como IVA o Ingresos Brutos, pero otros son cargos múltiples que no se sabe a ciencia cierta a qué se destinan, y engrosan el valor de la factura, argumentó.
La CAME analizó los datos corresponden al estudio de 100 boletas de luz de diferentes regiones del país. Hay ciudades como Concordia, en Entre Ríos, donde el 50% del valor de la boleta de luz son impuestos, planteó, y agregó que en San Juan se cobran 8 impuestos en la factura de luz que representan el 39,02% del valor de la misma» y que «a esto hay que sumarle el Valor Agregado de Distribución (VAD).
Gobernadores y empresarios
La jugada del gobierno compromete a los gobernadores de las provincias que ahora deberán decidir si acceden al recorte de impuestos en los servicios en medio del creciente malestar social por el tarifazo energético o si evitan el consejo presidencial para no afectar la de por sí compleja situación de los fondos públicos que las provincias necesitan para cumplir en principio con los gastos corrientes. La primera que salió en línea con Macri fue la gobernadora bonaerense María Eugenia Vidal.
Más allá del problema actual de las tarifas, el lobby de las empresas contra los impuestos que cobran las distintas jurisdicciones estatales es histórico y no se terminó con la aprobación parlamentaria de la Reforma Impositiva.
Lejos de saciarse con esa norma, las compañías renovaron este año los reclamos contra lo que denominan la superposición de impuestos nacionales, provinciales y municipales, un tridente al que responsabilizan en buena medida por la indecisión a la hora de realizar inversiones en la economía local.