Los bancos estuvieron en la mira en las últimas dos semanas. Por la decisión de sostener la no atención al público hasta que se generó el caos dos viernes atrás cuando abrieron sus puertas para pagar jubilaciones; porque falta en forma sistemática el dinero en sus cajeros automáticos; porque el rechazo a los cheques sin fondos es mucho mayor al que prometieron las autoridades del Banco Central luego de un supuesto acuerdo con las entidades; y porque los créditos destinados a las pymes al 24% anual no avanzan a pesar de que son una de las piezas centrales del gobierno para evitar que miles de pymes no paguen los salarios de abril o directamente quiebren.
Ayer, el secretario de la Pequeña y Mediana Empresa y de los Emprendedores, Guillermo Merediz, evaluó que la asignación de créditos bancarios destinada al pago de salarios de ese sector «tuvo un inicio más lento del esperado». Merediz agregó que «los bancos privados comenzaron otorgando financiamiento a las compañías que están en mejor situación».
Desde la perspectiva oficial, los bancos están bloqueando los créditos, primero porque no publicitan ni transmiten con toda claridad a las empresas cómo acceder al financiamiento y, segundo, porque plantean exigencias a las pymes que no se corresponden con el crédito que se está otorgando, según un seguimiento del Ministerio de Desarrollo Productivo que consignó la agencia de noticias estatal Télam.
Pedro Cascales, secretario de Prensa de la Confederación Argentina de la Mediana Empresa (CAME), alertó que por esas mismas razones, “muy pocas pymes han obtenido estas líneas”, por lo que la situación de miles de empresas pequeñas y medianas es “desesperante”.
Cascales subrayó que los bancos sólo les dieron créditos a las pymes “que ya tenían calificación crediticia antes de la cuarentena y que, además, pagan sueldos en ese banco. Algunos bancos se excusan con que el gobierno aún no instrumentó el Fondo de Garantías Fogar y que sin el mismo no pueden dar créditos a pymes que no tienen calificadas o que eventualmente no califican. Con lo cual, la gran mayoría de las pymes no estamos pudiendo acceder a esos créditos”.
El economista Fernando Camusso, de Rafaela Capital, señaló que «sólo el 18% de las pymes están completamente operativas. Y sólo el 10% de las mipynes. Son sólo estos segmentos los que pueden afrontar el pago de sueldos sin acudir a herramientas lanzadas por el gobierno. En el resto, las caídas en las ventas van del 70 al 90%. El 55% del universo pyme/mipyme se encuentra prácticamente inactivo».
Ayer, el Banco Central se vio en la necesidad de emitir un comunicado en el que informó que las mipymes recibieron 29.545 millones de pesos por la línea de auxilio del gobierno y que los bancos tenían aprobados otros 15 mil millones para otorgar.
En tanto, el titular del Banco de Industria y Comercio Exterior (BICE), José Ignacio de Mendiguren, indicó que 46 bancos recurrieron a la entidad la semana pasada para garantizar sus préstamos a pymes destinados al pago de salario por 90 mil millones de pesos.
Mendiguren explicó en declaraciones a radio Mitre que «una pyme no tiene que venir al BICE porque nosotros no lo otorgamos (al crédito), sino que tiene que ir a su banco y pedírselo, y nosotros somos los que le vamos a garantizar a ese banco y le decimos que el crédito que le dio a esa pyme nosotros lo financiamos». Estos créditos están garantizados por el Fogar, que el BICE puso en marcha el último lunes.
Adeba, la asociación de banca privada nacional, aseguró que informó que el desembolso de fondos entre el 13 de marzo y el 1 de abril totalizó $ 148 mil millones. Pero más allá de la danza de cifras, lo cierto es que las críticas llueven sobre el sistema bancario.
Camusso observó que «acá la única política efectiva es: Repros y diferimiento de todo tipo de pagos (créditos productivos, personales, hipotecarios, impositivos, etc.). Sobre todo impositivos. En esta el gobierno está solo, los bancos no son aliados ni cerca».
Más, cuando el dinero que los bancos emplean para los créditos no es plata que sale del cuadro actual de activos y pasivos con los que se mueven las entidades en forma habitual. Salió de los encajes, es decir, dinero inmovilizado en el BCRA y que les genera interés sin ningún tipo de aplicación. «
Ya se pueden anotar para la asistencia
Las empresas afectadas por la pandemia de Covid-19 ya pueden completar la inscripción al Programa de Asistencia de Emergencia al Trabajo y la Producción (ATP), informó ayer el Ministerio de Economía. El registro arranca mañana a través de la página de Afip, donde los empleadores deberán suministrar la documentación requerida para obtener los beneficios, y contempla el pago de salarios de los trabajadores, la postergación y/o eximición del pago de contribuciones patronales y la extensión del seguro de desempleo.
«La prioridad máxima hoy es la salud y desde el Estado acompañamos con políticas que alivianen las dificultades que se presentan en el marco de esta crisis», aseguró el ministro de Economía, Martín Guzmán, en un comunicado.
La preinscripción para obtener la prórroga de los aportes patronales arrancó el jueves pasado, y las empresas que quieran acceder al resto de los beneficios deberán registrarse a partir de mañana y hasta el 15, inclusive, en la página web de Afip, con su clave fiscal, y declarar la información económica que el programa requiera.
Luego comenzará una etapa de análisis de la empresa y, en caso de resultar la pyme afectada a partir de la cuarentena, se procederá a aplicar el beneficio, señaló el Ministerio de Economía. «