La conducción del sindicato del petroleo y el gas privado recibió el mandato de una asamblea con 600 trabajadores del yacimiento del El Tordillo, en el extremos sur de la provincia del Chubut, que los facultó para resignar salario a cambio de impedir los despidos.

Se los amenazó con 254 posibles despidos de Tecpetrol y por eso ayer hicieron la asamblea en la que se transmitió a todo el personal, casi 600 trabajadores la posición de la operadora, que dice que la única alternativa de minimizar despidos es aplicando un diagrama de 8 horas en todo el yacimiento para sostener un 50% de los equipos, explicó Carlos Gómez secretario adjunto del sindicato a la agencia Télam. 

Según el convenio colectivo, los trabajadores tienen jornadas de 12 horas, con un régimen de dos días de trabajo por uno de descanso. Así las cosas al mes trabajan 20 días y gozan de diez días de franco. Sin embargo, explicó Gómez, «en la actualidad los equipos trabajan de lunes a viernes, con lo cual hay recorte de salario».

Por otro lado, explicó el dirigente, los trabajadores de perforación, pulling y workover (remoción y mantenimiento de equipos) están «en la casa, porque no hay trabajo, cobrando un porcentaje».

Para el dirigente, en la actual coyuntura, “no es mal negocio resignar algunas conquistas” para preservas el empleo. 

Los gremios, además, reclaman a la empresa que explicite la curva de inversión que tienen prevista de acá en adelante. En 2013 las concesiones fueron prorrogadas hasta 2047 con el apoyo de los sindicatos. Por otro lado exigen que el gobierno informe qué se hará con la concesión (…) porque necesitan que se garanticen los puestos de trabajo y que se privilegie a las empresas regionales, «pero también que las empresas cumplan con las inversiones que prometieron», lo cual no les consta que haya ocurrido.

Los dirigentes se lamentaron porque «se sabe en el ambiente que en Vaca Muerta están invirtiendo casi 2.300 millones de dólares» hasta 2019 «mientras que acá (por Tecpetrol) esa inversión será de apenas 30 millones de dólares» y además dijeron que «se perdieron beneficios como los reembolsos por puertos patagónicos y los incentivos a la exportación petrolera».

Por ese motivo, el Sindicato petrolero pide la equiparación del precio interno del petróleo de Chubut al que se reconoce a Neuquén, que es diez dólares mayor.

Según las estimaciones gremiales, sólo durante 2016, se perdieron 1.400 puestos de trabajo en el sector petrolero provincial.