El Fondo Monetario Internacional consideró este jueves que «hubo un buen progreso» con la Argentina durante la primera revisión del acuerdo -que sigue en curso y que es una condición necesaria para liberar el desembolso de 4.100 millones de dólares- y confirmó que las metas prioritarias del entendimiento no se van a modificar.
Desde Washington DC, en la habitual conferencia de prensa que brinda cada jueves por medio, el portavoz del organismo, Gerry Rice, explicó que aún siguen las reuniones virtuales del staff del Fondo con los equipos técnicos del Ministerio de Economía y del Banco Central, que comenzaron con el encuentro presencial que tuvo el ministro Martín Guzmán con las autoridades el FMI durante la última cumbre de Primavera, en abril último.
«Los equipos están evaluando el impacto de la guerra en Ucrania en las perspectivas económicas de Argentina y están trabajando para priorizar las políticas según sea necesario para garantizar el cumplimiento de los objetivos y metas del programa», dijo Rice.
«Caracterizaría el estado de las discusiones sobre la primera revisión, como un buen progreso», dando a entender que existen perspectivas alentadoras de cara al informe de recomendación que debe realizar el staff al Directorio del FMI para evaluar el caso argentino.
«Esperamos comunicar pronto sobre la conclusión de la misión», agregó.
Al se consultado por la prensa sobre los datos de inflación y de otras variables afectadas por la guerra entre Rusia y Ucrania, Rice consideró que el Gobierno argentino y el Fondo buscarán «priorizar las políticas según sea necesario para garantizar el cumplimiento de los objetivos y metas del programa».
«Esos objetivos y metas permanecen sin cambios», subrayó.
Según Rice, «las autoridades (argentinas) siguen comprometidas con la implementación del programa; es su programa económico y, en este contexto, garantizar que se puedan cumplir los objetivos acordados».
De hecho, recordó que «el ministro Guzmán señaló recientemente que las autoridades ven el arreglo del FMI como un ancla y que los objetivos permanecen sin cambios».
Estas palabras se encuentran en la misma línea que las dichas por el funcionario argentino y por el director del Departamento Hemisferio Occidental del Fondo, Ilan Goldfjan, durante la conferencia de prensa brindada tras las reuniones de Primavera celebradas en Washington.
«Estamos trabajando muy de cerca con las autoridades para priorizar las políticas» que permitirán el cumplimiento de las metas, enfatizó Rice, sin precisar la fecha en la que finalizará la primera revisión.
El próximo 21 y 22 de junio la Argentina enfrenta vencimientos con el FMI por 2.690 millones de dólares.
La Argentina espera la culminación con éxito de la primera revisión para poder recibir el desembolso 4.100 millones de dólares previsto en el acuerdo.
Fuentes gubernamentales indicaron a Télam que es posible que la reunión de directorio para aprobar dicho giro se realice recién a principios de junio.
En total, entre junio y agosto, la etapa que cubriría esta revisión mientras se desarrollaría la segunda, la Argentina enfrenta vencimientos con el FMI por un total de 6.217 millones de dólares.
En septiembre, si todo va sobre rieles, se espera un tercer desembolso para el país, también de alrededor de 4.100 millones de dólares, necesarios para acompañar a las reservas en su recuperación, y a la vez cumplir con el pago de los vencimientos con el organismo.
En otro tramo de su conferencia de hoy, Rice afirmó que «el Fideicomiso de Resiliencia y Sostenibilidad (IRST) -recientemente creado- se está poniendo en marcha».
Este plan habilitará líneas de créditos a 20 años de plazo de repago y con 10 de gracia. Para la Argentina representaría la posibilidad de acceder a US$ 1.300 millones.
El l RST estaría operativo para fin de año, según indicó en su momento la titular del FMI, Kristalina Georgieva.
Si estos fondos ingresaran antes de fin de año, podrían ser una ayuda adicional para el cumplimiento de la meta de reservas del Banco Central para 2022.