Dirigentes y militantes de diversas organizaciones sociales, de la Central de Trabajadores de la Argentina Autónoma (CTAA), y de la Unión de Trabajadores de la Economía Popular (UTEP) desarrollaron este miércoles una jornada de protestas a nivel nacional en reclamo de la implementación de un Salario Básico Universal (SBU), un aumento para empleados públicos y privados y un aguinaldo para beneficiarios del programa Potenciar Trabajo, entre otras demandas.
Estas protestas -integradas por organizaciones cercanas al oficialismo, aunque críticas- se concentraron en la subida de la avenida Mitre del Puente Pueyrredón, que conecta el sur del conurbano bonaerense con la Ciudad de Buenos Aires.
Por otra parte y con otras demandas, el Obelisco porteño fue el escenario elegido por las organizaciones sociales nucleadas en el izquierdista bloque de la Unidad Piquetera (UP), con diferentes reclamos y consignas que pedían: «no al ajuste del Gobierno, no al pago de la deuda externa y no al Fondo Monetario Internacional» (FMI).
Según informaron los organizadores en un comunicado conjunto, manifestaciones similares se replicaban «en otros 50 puntos del país», con reclamos como la implementación de un «Salario Básico Universal; un aumento general de salario para empleados públicos, privados y jubilados de la mínima y aguinaldo para el programa Potenciar Trabajo».
Según precisaron, la jornada de protesta de hoy «es el resultado de más de 450 asambleas» que se hicieron el miércoles pasado en barrios populares de todo el país.
En declaraciones a la prensa al pie del Puente Pueyrredón, Juan Grabois, dirigente del Movimiento de Trabajadores Excluidos (MTE), reclamó la creación de un salario básico universal.
«El principal problema es la miseria qué hay en este país. El salario mínimo está rozando la línea de indigencia. Los trabajadores informales perdieron el 34% de su poder de compra. Tenemos un planteo: en un gobierno que dice que defiende al pueblo, como mínimo que los salarios, sean del sector formal, informal, popular, jubilados, estén por arriba de la línea de pobreza», planteó Grabois.
En ese marco, el dirigente de La Garganta Poderosa Nacho Levy se pronunció por el mismo reclamo y consideró que «el vacío inmenso de este modelo económico cruel se resuelve con una firma».
Asimismo, el dirigente social opinó: “El salario básico universal es un derecho que necesitamos hace mucho tiempo. Desde La Poderosa queremos homenajear a las compañeras y compañeros que no están. Acá debería estar gritando Ramona y tantos compañeros de los barrios populares que le garantizaban el plato de comida a esas siete millones de personas que no contiene ni el Estado ni el Mercado. Este es el momento de salir mejores”.
Por su parte, la secretaria general adjunta de la UTEP, Dina Sánchez, publicó en su cuenta de Twitter «Movilizados y en jornada nacional de lucha. Estamos en un día de lucha por un #SalarioBasicoUniversal para que nadie tenga como opción la indigencia, por aumento a los jubilados y aguinaldo para los trabajadores y trabajadoras de la economía popular».
Entre las organizaciones convocantes se encontraban la CTA- Autónoma, La Poderosa, OLP, Movimiento de Trabajadores Excluidos (MTE), Frente Popular Darío Santillán, Nuestramerica y el Partido Piquetero, entre otras
También se registraron cortes en el Cruce de Varela (Florencio Varela y Berazategui), en Puente La Noria (Lomas de Zamora) y en el Puente Saavedra de Capital Federal.
Las protestas incluyeron la realización de asambleas y movilizaciones en otras provincias como Tucumán, Santa Fe, Jujuy, Catamarca, Santiago del Estero, Salta, Formosa, Entre Ríos, Misiones, Neuquén y San Juan.
En Río Negro, la jornada de protestas se replicó con la militancia de la CTA Autónoma de esa provincia, que cortó en forma parcial el tránsito en el puente Basilio Villarino de la Ruta Nacional 3 entre Viedma y Carmen de Patagones y el carretero entre Cipolletti y Neuquén.
La protesta también se realizó en la ciudad de Bariloche, donde un grupo de organizaciones pertenecientes a la CTA Autónoma, y a la UTEP se movilizaron siempre por los mismo reclamos.
Por otra parte, y en forma diferenciada las organizaciones que integran el izquierdista bloque de la Unidad Piquetera (UP) realizaron su propia concentración en las inmediaciones del Obelisco, pero en rechazo al «ajuste del Gobierno, no al pago de la deuda externa y no al Fondo Monetario Internacional (FMI)».
«Seguimos reclamando un refuerzo de ingreso de 20.000 para precarizados, monotributistas, jubilados y potenciar trabajo. La universalización de los Potenciar Trabajo. El aumento del salario mínimo, vital y móvil a $100 mil. Y la atención integral a los comedores populares. Reclamamos que la ministra de Economía Batakis le ponga fecha a la reunión solicitada por la Unidad Piquetera hace una semana», puntualizaron en un comunicado de prensa.
El Polo Obrero (PO) planteó sus reclamos de manera separada a las otras organizaciones sociales como la CTA-A, la UTEP y el MTE manifestando su «desacuerdo» con la propuesta de creación de un Salario Básico Universal (SBU).