El gobierno nacional relanzó un subsidio específico para las cooperativas de trabajo que era muy esperado en el sector. Pero, a contrapelo de esas expectativas, quienes elaboraron el beneficio no tomaron en cuenta el escenario de dificultades económicas que ha generado la pandemia de coronavirus, elemento que sí ha sido eje de una cantidad de iniciativas destinadas a paliar la situación de las empresas.
Tal como anticipó Tiempo, el gobierno estableció un nuevo monto para la llamada Línea 1 que se otorga a los integrantes de las cooperativas de trabajo. Se trata de un subsidio mensual que sirve para complementar el ingreso de cada cooperativista. La resolución 111/20 de la Secretaría de Empleo del martes pasado lo elevó a 6500 pesos.
Pero salvo este incremento, el resto de las características de este subsidio se mantienen como estaban antes de la actual pandemia. Por ejemplo, no alcanza a los trabajadores autogestivos (como se conoce a los integrantes de las cooperativas de trabajo) que ya lo hayan recibido antes por 24 meses, no importa bajo qué circunstancias. Tampoco a los que tengan ingresos mensuales superiores al Salario Mínimo, Vital y Móvil, cuyo nivel quedó estancado en 16.875 pesos desde noviembre del año pasado, a pesar de las fuertes subas de precios de productos esenciales que se sucedieron desde ese momento.
Los considerandos de la resolución 111/20 no mencionan al Covid-19, la enfermedad provocada por el coronavirus y que ha generado un parate económico de alcance nacional. Es decir, mantiene las características de un subsidio de ‘épocas normales’, cuando claramente éstas no lo son. El contraste es notable con la batería de medidas que el gobierno ha destinado al sector privado, especialmente a las pequeñas y medianas, motivado por la pandemia.
“Nosotros respaldamos todas las iniciativas públicas destinadas al sector, pero vemos con cierta preocupación que esta resolución no toma en cuenta que muchas cooperativas de trabajo vienen de cuatro años de crisis y que a ello se le agrega ahora la crisis sanitaria”, le dijo a Tiempo Ramiro Martínez, presidente de la Confederación Argentina de Trabajadores Cooperativos Asociados (Conarcoop).
Martínez indicó que las limitaciones en el cobro de la Línea 1, especialmente la de que no pueden acceder al beneficio quienes ya la hayan percibido durante 24 meses, deja afuera “a 2500 trabajadores autogestionados que están en una situación muy crítica porque están con ingresos nulos producto de la cuarentena”. Martínez agregó que por este motivo mantuvo un diálogo con el ministro de Trabajo, Claudio Moroni, a quien le manifestó esta realidad. “En esta coyuntura necesitamos más planes y más ayuda”, exclamó.
Federico Tonarelli, presidente de la Federación Argentina de Trabajadores Autogestionados (Facta) también remarcó las limitaciones impuestas al otorgamiento de la Línea 1. “Pedimos expresamente que se equipare a los trabajadores y las trabajadoras autogestionadas asociadas a cooperativas de trabajo en líneas de asistencia similares al Repro”. Pero, “se nos sigue discriminando”, agregó.