La decisión oficial de eliminar el piso tarifario para los vuelos de cabotaje sigue levantando polvareda. Después de la celebración de las aerolíneas low cost y de los cuestionamientos de los colectivos de larga distancia, los gremios aeronáuticos asomaron con sus primeras críticas a la noticia que estalló en la tarde del lunes y que este martes ganó espacio en todos los medios nacionales.
Desde la Asociación Argentina de Aeronavegantes (AAA) consignaron a Tiempo que el anuncio causó sorpresa en el ambiente y motivó que este martes mismo se realizaran las primeras reuniones para tratar el nuevo escenario.
El gremio lamentó que la decisión del gobierno nacional rompió de hecho con los consensos que se trabajan con el Ministerio de Transporte. Una fuente de la entidad enumeró que “pedimos ciertas reglas, que todas las nuevas líneas que vinieran tuvieran un piso de regulación, con trabajadores sindicalizados, con un convenio marco, y con una base salarial”.
La fuente destacó que en la mesa de negociación se acordó mantener el piso tarifario, por lo que el gobierno nacional habría incurrido en un desaire que los gremios intentarán aclarar en una reunión que ya pidieron con el titular de la cartera transportista, Guillermo Dietrich. “Al hacer las cosas de esta manera van para atrás con lo que se venía dialogando. El ministro lo anunció ayer (por el lunes) después de reunirse con (el presidente Mauricio) Macri”, agregó la fuente.
A la espera de que se les conceda la reunión, los aeronavegantes emitieron un comunicado que hicieron circular de manera interna. El texto representa “un rechazo público” según la definición de los voceros consultados.
El resto de los sindicatos aeronáuticos todavía no se manifestó pero en el ambiente aseguran que, con diferencia de detalles, la mayoría coincide con el rechazo que manifestaron internamente los aeronavegantes.
El comunicado que elaboró la AAA expresó: “su total desacuerdo con la decisión oficial de dejar sin efecto el mínimo de la banda tarifaria para vuelos de cabotaje, tomada por la administración nacional”.
La medida, agregó el mensaje gremial: “es contraria al compromiso expresado en numerosas ocasiones por el Ministerio de Transporte y resulta además altamente perjudicial para todas las empresas del sector y sus trabajadores”.
El sindicato que representa a azafatas y comisarios de abordo consideró: “inaceptable la doble vara aplicada por el gobierno, que mira para un costado cuando se trata de un modelo precario (low cost) en perjuicio de las aerolíneas tradicionales que vienen sosteniendo hace años el mercado aerocomercial. Con medidas como esta, se ven seriamente amenazados en su normal funcionamiento y continuidad”, advirtió