El nuevo presidente de los argentinos se conocerá en las últimas horas de hoy, tras la disputa entre los candidatos Sergio Massa, de Unión por la Patria (UP), y Javier Milei, de La Libertad Avanza (LLA). Las empresas, gane quien gane, toman carrera para lanzarse a una nueva etapa en la relación con la administración pública desde mañana mismo.

En la última semana, en medio de la ajustada carrera entre los dos candidatos, tres de las entidades más representativas del lobby empresarial plantearon formalmente sus propuestas de políticas públicas para el día después de la elección.

En particular, el Foro de Convergencia Empresarial (FCE) les presentó un documento titulado «Bases para la formulación de políticas de Estado». En el plano económico, el documento reclamó políticas macro para atacar la inflación en forma integral y bajar la tasa a niveles regionales e internacionales; incentivar la inversión privada desde la «previsibilidad, estabilidad y formalidad de las reglas de juego»; garantizar los procesos de formación de precios con el funcionamiento de mercados transparentes «evitando intervenciones distorsivas»; y reducir la presión tributaria, entre otras medidas.

El texto también aconsejó reconocer la situación de los sectores más vulnerables, por ejemplo, manteniendo la AUH: «El Estado debe asegurar un piso mínimo de ingresos requerido para vivir con dignidad», consideró el espacio.

Las de EE UU, también

La cámara de comercio argentino estadounidense Amcham también presentó un documento, llamado «10 propuestas para una Argentina viable», en consideración de la «necesidad de introducir rápidamente reformas integrales y de profunda transformación», expresó la entidad.

Entre los pedidos del documento se destacaron el de un Estado «eficiente y centrado en respetar la forma representativa, republicana y federal de gobierno»; que intervenga para «asegurar la soberanía monetaria»; y que desarrolle y potencie al sector privado. Asimismo, incluyó pedidos de revisión de la política de comercio exterior.

También abogó por un plan de estabilización macroeconómica que asegure la «responsabilidad fiscal y las reglas monetarias sustentables».

A su vez propuso reformas impositivas y laborales a nivel nacional, provincial y municipal «para equiparar derechos y obligaciones, simplificar procesos, eliminar impuestos y gravámenes distorsivos, y adecuar la regulación a los modelos laborales del siglo XXI, creando un entorno basado en los principios de equidad y progresividad».

El texto también aconsejó reformas del sistema sanitario y de la educación.

En el tramo final de la campaña, las entidades buscaron reuniones con los candidatos para explicar estos programas en forma directa. Los encuentros formales se produjeron en dos almuerzos organizados por el Consejo Interamericano de Comercio y Producción (Cicyp) en el Alvear Palace Hotel.

Reformas estructurales

En esos encuentros, los empresarios también fueron críticos de la situación político-económica y renovaron sus reclamos de reformas profundas como camino obligado hacia un escenario de mayor competitividad del sector privado y desarrollo del país.

Si bien Milei es el candidato que tiene el discurso más alineado con los reclamos tradicionales de las grandes empresas, los dos presidenciables hicieron promesas de transformaciones importantes a futuro.

Entre otras cosas, Milei adelantó que su prioridad será basar la competitividad de las empresas locales en las reformas fiscales y laborales, y Massa prometió medidas de incentivación al sector privado, como la aplicación de «cero impuestos internos» sobre todo el incremental exportador para todos los sectores de la economía.

El candidato ultraderechista de LLA prometió «una reforma del Estado que permitirá bajar el gasto público, bajar impuestos, eliminar regulaciones, modernizar el mercado laboral y bajar las penalidades con un sistema de seguros de desempleo», como paso previo a la apertura total de la economía.

En el sector empresario aguardan el día después al balotaje para encarar una negociación en forma completa. El diálogo informal fue importante en la previa de la elección y los canales están aceitados para

continuar desde el lunes. «

También merodean a los candidatos

En la presentación de Sergio Massa ante el Consejo Interamericano del Comercio y la Producción (Cicyp), se destacó la presencia del empresario Francisco de Narváez, quien no sólo integró la comitiva del candidato de Unión por la Patria, sino que fue el primero en responder preguntas en la conferencia de prensa que se organizó después del almuerzo.

La centralidad del empresario disparó rumores sobre la posibilidad de que integre el gabinete de un eventual gobierno del oficialismo. Al día siguiente, De Narváez mismo lo desmintió en una entrevista, pero la idea quedó instalada.

Muy cerca de Javier Milei se vio al industrial automotriz Cristiano Rattazzi, que no escatimó recursos, verbales y no verbales, para festejar la presencia del candidato en el almuerzo del Cicyp, un día antes que Massa.

El «Tano» es uno de los pocos dirigentes privados que demostró su predilección por Milei aun cuando  el empresariado, receloso de la conducta extravagante del candidato, lo miraba con desconfianza.