La inflación de enero, del 2,3 por ciento para todo el territorio nacional, se explica en buena medida por el hecho de que las tarifas de servicios públicos y el valor de los combustibles estuvieron prácticamente estables, salvo en algunas provincias donde hubo alzas del precio del transporte o en el servicio de distribución de electricidad. El otro factor que contribuyó fue que el dólar mayorista se mantuvo planchado.
Pero, el reverso de esa moneda es que el gobierno nacional asegura que su objetivo no es congelar tarifas y combustibles por siempre. De hecho, entre mayo y junio ambos congelamientos concluyen.
Cómo se moverán los precios una vez que estos precios se muevan, es una gran incógnita, ya que dependerá también del valor del dólar, que a su vez estará atado a la marcha más general de la negociación de la deuda pública.
El titular del Instituto Nacional de Estadística y Censos (Indec), Marcos Lavagna, fue cauto en relación al resultado de la inflación de enero. «Es una buena noticia que esté creciendo menos. Pero yo sería muy cauto todavía en suponer que ya está controlada la inflación», dijo en una entrevista con la emisora Radio con vos.
El presidente Alberto Fernández se expresó en el mismo sentido: «Es un dato auspicioso, pero no suficiente», dijo en declaraciones a Radio Rivadavia.
Lavagna explicó que «distintos factores» entraron en juego para este descenso de la inflación respecto de los últimos seis meses. «Algunos eran esperables. Entre agosto y diciembre las prepagas venían aumentando a más del 6 por ciento por mes; telefonía e Internet, más del 5 por ciento; combustibles, más del 3,5 y el 4 por ciento. Y todos esos rubros aumentaron alrededor del 0% en enero. Eso, naturalmente, iba a hacer que la inflación en vez de ser 3,7% sea más baja».
Del mismo modo, Lavagna indicó que en el Área Metropolitana de Buenos Aires (Capital y el conurbano bonaerense), la inflación fue más baja que n el resto del país por el congelamiento tarifario. «Algunas cuestiones que pegan más a Capital Federal y Gran Buenos Aires, como tarifas, estuvieron congeladas». También marcó que «hubo algunas cuestiones estacionales: por ejemplo, prendas de vestir. Todos los enero hay una caída por el cambio de temporada».
Sobre los sectores que subieron sus precios en enero, indicó: «El rubro esparcimiento y cultura subió un 5 por ciento también por cuestiones estacionales. Alimentos también tuvo una suba importante, que en parte tiene que ver con la vuelta del IVA en algunos casos».
Los datos
La inflación de enero fue del 2,3 por ciento. El Indec indicó también que la inflación de los últimos 12 meses fue del 52,9%. Se trata del valor más bajo desde mediados de 2018, a excepción de julio del año pasado (2,2%).
Los ítems que más colaboraron con la baja en el crecimiento inflacionario fueron Salud, con una caída del 2% y Equipamiento y mantenimiento del hogar, con un -1,3%. En tanto, Comunicación creció apenas 0,1%; Educación, 0,5%; Vivienda, 0,6%, y Prendas de vestir y calzado, 1,1%.
En tanto, los ítems que más impulsaron la inflación fueron Recreación y cultura, con un 5%; Alimentos, 4,7%; Bebidas alcohólicas y tabaco, 4,3%, y Restaurante y hoteles, 4,2%.
A nivel interanual, los puntos más altos siguen siendo Salud, con un 63,9%; Alimentos, 58,8%, y Equipamiento y mantenimiento del hogar, 57,4%.
El ítem Alimentos y bebidas no alcohólicas es el más relevante, por su gran incidencia en el índice. Los productos que más subieron durante enero fueron Azúcar, 14,7%; Pan de mesa, 10,4%; Arroz blanco, 11,1%; Fideos secos, 5,8%; Todas las carnes: asado (11%), cuadril (4,6%), nalga (5,5%), paleta (9,2%) y carne picada común (13,5%); Filet de merluza fresco, 11,4%; Lácteos: leche (7,9%), yogur firme (11,7%) y queso cremoso (5,1%).