Con la producción paralizada desde hace meses y 24 nuevos despido durante esta semana, los trabajadores de Acindar decidieron junto a la Unión Obrera Metalúrgica (UOM) declarar el estado de alera.
El miércoles, un grupo de empleados fue trasladado de una planta a otra y Litoral Gas cortó el servicio en Navarro, hecho que se sumó a los 24 despidos de los últimos días.
Hace más de un año venimos hablando del posible cierre por achiques, retiros voluntarios. Todos despidos encubiertos. El miércoles nos informaron sobre el traslado de personal a la planta Heredia y en Navarro nos apagaron el horno. No laminamos más y quedamos 60 compañeros flotando en la fábrica con la producción frenada, detalló en declaraciones periodísticas el delegado de comisión interna, Federico Espíndola.
El representante de los trabajadores reveló también que la empresa Litoral Gas colocó cepos en la planta Navarro, donde hace un año había 180 empleados y ahora hay apenas poco más de 60. Falta que vayan y nos corten la luz. Esto va camino al cierre, sentenció.
Los trabajadores entienden que la estrategia de la empresa es continuar con los traslados para vaciar la planta Navarro y, mientras tanto, continuar con el achique en Heredia. Por eso, organizados en asamblea, tomaron la decisión de salir a la calle.