La gran apuesta del gobierno para reavivar la economía volvió a crecer en abril aunque con una leve desaceleración respecto a marzo. La construcción subió en el cuarto mes un 10,5% y acumuló en el primer cuatrimestre una suba del 3,8%.
Aunque en un nivel ligeramente menor que en marzo, cuando cerró con una suba de 10,8%, la construcción se mantuvo en buen nivel por segundo mes consecutivo, tras más de un año y medio de datos negativos.
El Indicador Sintético de la Actividad de la Construcción (ISAC) que elabora el Indec informó que el sector hubo 224.638 puestos de trabajo formales en marzo, un 3,1% más que de los que se registraron un mes antes y un 5,6% por encima de marzo de 2016.
Otro indicador positivo es el de la superficie autorizada para edificar. El ISAC informó que en abril se llegó a los 649.874 metros cuadrados, un 18,1% por sobre el número de abril del año pasado aunque un 0,2% menos en el acumulado cuatrimestral.
En tanto, los insumos también aprecian subas significativas. Los despachos de asfalto subieron el 80,6%; el hierro redondo para hormigón trepó un 33%; el cemento hizo lo propio otro 11,6%; mientras que los ladrillos huecos subieron un 8,4%. Además se vendió en abril un 5,3% más del resto de los insumos, una categoría que incluye vidrio y tubos de acero sin costura.
También subió el expendio de placas de yeso un 0,6%. Entre los datos negativos, el ISAC apuntó pisos y revestimientos cerámicos (-9,2%); sanitarios de cerámica (-4,1%) y pinturas para construcción (-1%).
Los números indican que la actividad se sostiene por la obra pública mientras que la obra privada, grande y pequeña, se mantiene en un segundo plano.
En la encuesta que realiza el Indec entre las empresas del área, priman los que ven una tendencia alcista para los próximos meses, en especial los que se dedican a la obra pública.
El 63,7% de los encuestados que se dedica a la obra privada prevé que la construcción seguirá en estos niveles o que disminuirá. El resto 35,3% confía en que el sector aumentará en el próximo trimestre.
Entre los dedicados a la obra pública, el 72,7% opinó que la actividad aumentará entre mayo y julio de 2017 mientras que un 25% cree que no cambiará y el 2,3% restante prevé que disminuirá.
Quienes estimaron una suba, la atribuyeron principalmente a los nuevos planes de obras públicas (37,3%), al reinicio de las obras públicas (23,7%) y al crecimiento de la actividad económica (15,6%), enumeró el informe de lndec.
Con respecto al tipo de obras que caracterizará al segundo trimestre del año, las empresas que se dedican principalmente a las obras privadas repartieron sus respuestas de la siguiente manera: otras obras de arquitectura (21,7%), viviendas (21,6%) y montajes industriales (19,6%) entre otras. Por su parte, las empresas que se dedican fundamen-talmente a obras públicas respondieron: construcción de obras viales y de pavimentación (50,4%), viviendas (17,8%) y otras obras de arquitectura (9,3%) entre otras, agregó la encuesta.
En cuanto a la contratación de mano de obra, el 64,7% prevé que no habrá cambios, el 29,4% estimó un aumento de sus planteles y un 5,9% estima que habrá una disminución. Los que desarrollan obra pública piensan aumentar los contratos un 50% y un 47,7% no piensa emplear a nuevos trabajadores. El 2,3% restante opinó que el personal disminuirá.
Condiciones
Si bien se mantienen optimistas, las firmas de obra privada apuntaron la necesidad de que el gobierno garantice estabilidad en los precios de los insumos como primera condición para que se cumplan los pronósticos. En segundo lugar, reclamaron medidas fiscales. También hablaron de incentivos crediticios y al mercado laboral.
Las que realizan obras públicas también priorizaron los precios pero en segundo lugar pidieron créditos y dejaron el tema fiscal para el tercer lugar.
