El proyecto para modificar el régimen del Impuesto a las Ganancias que superó airoso la instancia de Diputados podría ser tratado este miércoles en el Senado. Las repercusiones posteriores al batacazo de la semana pasada continuaron en el fin de semana largo y este lunes no faltaron cruces dialécticos entre defensores de la iniciativa opositora y partidarios de la posición de Mauricio Macri y Cambiemos.
El secretario General de la CGT, Héctor Daer, volvió a cuestionar los rumores de un posible veto presidencial. Yo no quiero hablar de eso, porque si lo ponemos en agenda se naturaliza una medida que tiene carácter excepcional, a pesar de ser una facultad que tiene el Presidente, y no es bueno que cada vez que discutimos una ley en el Congreso se esté hablando de veto».
Daer, quien la semana pasada opinó que la consecuencia del veto será la derrota de Cambiemos en las próximas elecciones legislativas, agregó hoy en diálogo con Telam que «a las instituciones hay que respetarlas y este es el rol que nos da la democracia a cada uno de los actores institucionales», afirmó Daer en declaraciones a la prensa, al asistir este mediodía a la asunción del consejo directivo de la Asociación Obrera Textil (AOT), cuyo secretario general es Hugo Benítez.
El dirigente gremial de la Sanidad salió también a discutir las advertencias de una supuesta «catástrofe» fiscal que vaticina el Gobierno. Los mismos que opinan eso nos dijeron que hoy íbamos a estar mucho mejor, y la realidad es que estamos con más pobreza, con más desempleo y lo que es peor de todo, la actividad económica paralizada», desestimó. «Nosotros -añadió- pensamos al contrario: esta ley de ganancias va a generar consumo, esto va a poner de vuelta más salario en el bolsillo de los trabajadores, y éstos lo van a volcar al consumo, haciendo mover la rueda del aparato productivo nuevamente».
Un pronunciamiento favorable al gobierno se oyó en el rincón empresarial. El Grupo de los 6 (G6) que nuclea a las cámaras más importantes de Córdoba llamó a no aprobar «medidas sin el suficiente análisis de los impactos reales de los cambios y sin previsión de cómo se hará para cubrir el déficit fiscal que generarían estas modificaciones.