Fracasó la audiencia que mantuvo la Asociación Bancaria con los representantes empresariales. La reunión tenía el objetivo de ratificar el acuerdo que había sido cancelado por el gobierno y luego avalado por la Justicia.
Hace unos días, el Gobierno le había bajado el pulgar al acuerdo entre trabajadores y empresarios bancarios. A última hora del martes, la Cámara de Apelaciones del Trabajo estableció la obligatoriedad de las cláusulas del acuerdo firmado y dispuso ordenar al Poder Ejecutivo que no interfiera en el cumplimiento del acuerdo.
El Gobierno estalló de furia por la intervención de la cámara, en contra de sus intereses. Tal es así, que analiza la posibilidad de pedir juicio político a los camaristas, según informó el periodista Iván Schargrodsky.
El miércoles, la Asociación Bancaria se reunió con las cámaras empresariales para volver a foja cero y ratificar el acuerdo. Sin embargo, el secretario general del gremio Sergio Palazzo anunció que no hubo acuerdo y adelantó que analizarán medidas de fuerza. Al mismo tiempo, pero en sentido más general, Palazzo recordó que la CGT tomó la decisión de confrontar al Gobierno y advirtió: Las condiciones están dadas para un paro nacional.
