Según datos del INDEC publicados hoy los salarios crecieron en junio, en promedio, un 4,8%. Durante el mismo mes los precios habían escalado un 5,3%. En el acumulado de los primeros seis meses del año los haberes promedio crecieron un 34,3% cuando la inflación llegó hasta un 36,2%.
Dentro de los asalariados, los más perjudicados resultaron los trabajadores informales cuyos ingresos se incrementaron en el primer semestre en apenas un 27,9% quedando 8,3 puntos por detrás de la suba de precios. El conjunto de los trabajadores registrados obtuvo incrementos de sus haberes del 35,7% en seis meses y del 69,8% en el último año. De este modo lograron recuperar su poder adquisitivo en un 3,5%.
Dentro de ese universo los trabajadores del sector público, que arrastran un retroceso muy sensible en los últimos siete años, lograron recomponer haberes en forma interanual con una suba del 72,6% que implica una recuperación del poder adquisitivo del orden del 5%.
Distinta fue la suerte del sector informal que, en el último año vio crecer sus ingresos en un 58% que implican una caída del salario real del 3,65%.