El 32% de los argentinos es pobre y el 6,7 por ciento es indigente, informó el INDEC con datos actualizados al segundo semestre de 2018. La información dice que el 23,4% de los hogares quedó dentro de los márgenes de la pobreza a la par de un 4,8% que calificó como indigente.
En pocas palabras, el porcentaje de pobres equivale a casi nueve millones de personas en el universo de los 31 aglomerados urbanos que mide el gobierno, pero si se extrapola esa proporción al total de la población argentina los pobres serían unos 14 millones de personas. Y si se toman en cuenta los últimos doce meses, más de 7200 personas por día cayeron en la pobreza.
Como pasó con otros indicadores económicos recientes, el dato de la pobreza contradice el argumento del gobierno de que la economía repunta lentamente y empieza un sendero positivo. De hecho dinamita uno de los tres ejes de la campaña que lo catapultó al poder en 2015: el mentado objetivo de la Pobreza Cero.
Los números que el INDEC toma de la Encuesta Permanente de Hogares (EPH) expresan un crecimiento en la comparación con el semestre anterior (había 27,3% de personas pobres y 4,9% de indigentes) y también con el segundo semestre del ciclo 2017 (25,7% de pobres y 4,8% de indigentes).
En los 31 aglomerados de referencia habitan 27.877.858 personas en 9.171.687 hogares.
El ente estadístico precisó que en el segundo semestre del año pasado los pobres alcanzaron el número de 8.926.592 personas residentes en 2.142.945 hogares.
Otros 442.859 hogares habitados por 1.865.867 personas quedaron dentro de los márgenes de la indigencia.
En los partidos del Gran Buenos Aires la pobreza fue del 35,9% y la indigencia del 8,5% de las personas y en la Ciudad de Buenos Aires los pobres resultaron el 12,6 por ciento de la población y los indigentes el 2,5%.
En el Noreste (Corrientes, Formosa, Gran Resistencia y Posadas) se registró el promedio más alto de pobres y de indigencia, con un 40,4% y 9,8 por ciento del total respectivamente.