Bajo un calor sofocante, se movió la marea de gente que se acercó a la Plaza de Mayo para dar la bienvenida al nuevo presidente, Alberto Fernández. Hubo mucha gente autoconvocada y también asistieron muchos sindicatos, movimientos sociales y corrientes partidarias, con el fin de mostrar apoyo al flamante gobierno.
El nuevo gobierno pretende que el sindicalismo sea una de las patas que sostenga al modelo; sobre todo, en los primeros tiempos, cuando se deberá lidiar con el 40 por ciento de pobreza y el 12% de desempleo dejado por el gobierno de Mauricio Macri.
Ese soporte sindical se expuso en la concentración de este martes. Como adelantó Tiempo en la edición del domingo último, desde Avenida Diagonal Sur partieron las distintas vertientes de la CGT, con SMATA, UPCN y la UOM a la cabeza.
Camioneros, por su parte, concentró frente al Congreso y la numerosa columna se acercó a la Plaza por la tarde.
Por el centro de la Plaza, aparecieron otras banderas de la CGT, con grandes columnas de la UOCRA y Comercio. También por esa vía, se movió el triunvirato piquetero conformado por la CTEP, Barrios de Pie SOMOS y la Corriente Clasista y Combativa.
Desde el lado de la Catedral, se sumaron la Corriente Federal, con los gráficos, canillitas y bancarios a la cabeza, la CTA de los Trabajadores y ATE Capital. La CTA Autónoma, de tradición no peronista, también dijo presente y manifestó su apoyo a Alberto Fernández.
Por Avenida de Mayo, además, ingresaron las corrientes partidarias del Frente de Todos como La Cámpora y Nuevo Encuentro.
El resultado fue una marea de gente que no se amedrentó con los 37,8 grados que marcó el termómetro y disfrutó de una Plaza sin rejas y con las patas en la fuente.