A la vuelta de sus vacaciones, el presidente Mauricio Macri firmará un decreto para transferir a la provincia de Buenos Aires 25 mil millones de pesos como compensación por el congelamiento del Fondo del Conurbano. Se trata de un reclamo histórico que la gobernadora María Eugenia Vidal llevó incluso el año pasado a la Corte Suprema de Justicia. La medida despertó las quejas de otros gobernadores que lo ven como un trato preferencial con miras a las elecciones, pero en el gobierno provincial negaron que se trate de una medida “electoralista”.

El decreto, que está en proceso de elaboración en la Jefatura de Gabinete de la Nación, prevé el giro de 15 mil millones en efectivo para cubrir pagos y erogaciones que forman parte del déficit fiscal provincial del 2016, que cerró en 28 mil millones de pesos. Los 10 mil millones restantes serán para condonar deudas con la Nación. Estos 25 mil millones se suman al auxilio de 10 mil millones que envió la Nación a comienzos del año pasado para cubrir gastos corrientes.

El giro de dinero de esos 25 mil millones representa la mitad de los recursos que el gobierno bonaerense estima que debería recibir al año por el Fondo del Conurbano que permenece congelado en 650 millones de pesos desde 1996.

El ministro de Economía bonaerense, Hernán Lacunza, negó «cualquier intención electoralista» detrás de esa asistencia y aseguró que «no afecta en nada los recursos que van para las otras provincias», por lo que minimizó así la posibilidad de descontento que pudieran manifestar otros gobernadores, sobre todo de la oposición. 

«No es para el (presente) año electoral, es para el año 2016 que se terminó, es para cubrir parte del agujero que heredó la Provincia de la gestión anterior», aclaró el funcionario y resaltó que, en el marco de esta transferencia, «no se toca ningún peso que va para las otras provincias, no se toca la masa coparticipable».

Lacunza detalló en declaraciones radiales que estos 25 mil millones de pesos, parte de los cuales se destinarán a avanzar en obras hidráulicas, rutas, cloacas y agua, «son un esfuerzo que hace directamente la Nación con sus propios recursos no de las provincias» e insistió: «Lo despego de cualquier intención electoralista».