La divisa norteamericana volvió este miércoles a superar el techo de los $18 y cerró en $18,05 a pesar de la intervención del Banco Central, que vendió U$S 584 millones, la mayor en un día desde que empezó el actual raid del billete estadounidense.
La suba que ya acumula casi $ 2 desde principios de junio preocupa al gobierno por su impacto en los precios a pocos días de las PASO. De hecho, el vocero de la Cámara de Supermercados, Fernando Aguirre, reconoció este miércoles que el alza de los precios en los supermercados fue del 5% en promedio en julio. Según coincidieron los índices de la CGT y del Congreso la inflación del mes de julio se ubicó por encima del 2%. Mañana jueves se conocerá el Índice de precios al Consumidor del INDEC.
Ante esa situación es que el gobierno decidió modificar, a fines de julio, su política sobre el mercado de cambios promoviendo una fuerte intervención del BCRA que, de todas maneras, no sirvió para evitar que la divisa superara los $18.
A diferencia de lo que había venido haciendo y diciendo la entidad, en las últimas semanas inyectó al mercado, en distintas jornadas, una cifra superior a los 1300 millones de dólares desde el viernes 28 de julio cuando ofreció U$S 320 millones. Ayer fueron otros U$S 208 millones que, por lo visto, no sirvieron para revertir la tendencia alcista.
Juan Manuel Pazos, Head de estrategia de Puente hermanos consultado por Tiempo opinó que es un movimiento precautorio previo a las elecciones dominado por los locales. Algo que ocurre en todos los procesos electorales. El mercado de cambios argentino tiene tres drivers: la demanda privada, la oferta de los productores agrícolas y la oferta de divisas de los extranjeros. La incertidumbre pre electoral juega contra los tres. El minorista busca cubrirse, el sojero tiende a retener la soja porque es un activo dolarizado y esperan un tipo de cambio más atractivo. Además la fortaleza del tipo de cambio venía dependiendo del ingreso de dinero del extranjero que no es lo que está ocurriendo en los dos últimos meses.
El especialista justificó la intervención de la entidad monetaria explicando que el BCRA no cree que la suba esté asociada a factores estructurales. Es cierto, la economía es la misma que hace dos meses. Está interviniendo para controlar un factor que es externo a la economía.
Sin embargo, la primera reacción del BCRA ante la escalada del dólar había sido la suba de las tasa de interés de las Lebacs para orientar el ahorro a esas operaciones desestimulando la demanda de dólares.
Para Gabriel Holland de HR Global si bien es cierto que en el corto plazo tiene mucho que ver el tema electoral pero si en el largo plazo no se resuelven problemas de fondo de la economía como el gasto público habrá más presión sobre el dólar.