En consonancia con el acuerdo que selló el gobierno nacional para los empleados públicos, las autoridades del Ministerio de Educación y el Consejo Interuniversitario Nacional (CIN) ofrecieron a los docentes de enseñanza superior un incremento salarial del 7% para el período que va desde julio a diciembre de este año. La suba se computará sobre el salario de junio pero se percibiría partir del salario de octubre.
La inflación en el período, a partir de los meses que ya pasaron y las proyecciones de los que vendrán según el relevamiento que realiza el BCRA, sin embargo, podría llegar hasta un 18%.
Durante el primer semestre del año los salarios de los docentes universitarios habían acumulado, una suba de entre un 17% y un 20%. Sin embargo, ocurre que en el mes de marzo se percibió la última cuota de la cláusula gatillo acordada para el período paritario 2019 y que debía cubrir la inflación acumulada entre septiembre de 2019 y febrero de 2020. Allí se percibió una cuota del 9,7% cuando la misma debía alcanzar los 14,7%. Luego se otorgarían incrementos del 3,3% y el 3% en mayo y junio.
Por ese motivo, las federaciones que agrupan a los docentes universitarios en todo el país se encuentran divididas acerca de la aceptación o no de la propuesta.
La Conadu Histórica, enrolada en la CTA Autónoma liderada por Ricardo Peidró y Hugo Godoy y, además, con fuerte presencia de la izquierda que conduce el sindicato de base de la Universidad de Buenos Aires (AGD-UBA), ya anunció su rechazo de la propuesta y lanzó una medida de fuerza con un paro de 48 horas que arrancó el martes y este miércoles movilizará al Congreso Nacional para manifestar su repudio al contenido y la orientación del presupuesto 2021.
Del otro lado, la Conadu que integra la CTA de los Trabajadores liderada por el dirigente oficialista Hugo Yasky, asegura en un comunicado que, tomando el año calendario, la propuesta del gobierno alcanzaría «entre un 26,13% y un 29,9%» que «con una proyección de la inflación a diciembre es del orden del 32%, la cláusula de revisión en diciembre y en febrero nos permitiría, de aprobarse el acuerdo, compensar la pérdida frente a la inflación y lograr así el objetivo trazado para la paritaria 2020 de no perder frente a la inflación alcanza para cubrir gran parte de la inflación pautada durante 2020».
Con todo, durante el mismo miércoles pondrá en consideración de sus organizaciones de base la aprobación o no de la propuesta luego de que, en un congreso anterior, se impusiera por 18 votos contra 11 la realización de un paro de 48 horas contra la propuesta de la conducción de la federación y que, según pudo saber Tiempo Argentino, en vísperas del congreso del miércoles, sucesivas asambleas de base de sindicatos afiliados a esa federación (Rosario, Río Cuarto, Sarmiento, Jauretche, etc) rechazaran la propuesta por insuficiente.
Fuentes cercanas a la conducción de la CONADU, aseguraron a Tiempo que su evaluación indica que se trata de una propuesta aceptable en el marco de la “tragedia social heredada del macrismo y la pandemia” y, además, se mostraron confiadas en que se aprobará.
Por el lado de la CONADU Histórica, su secretario de Organización, Antonio Roselló, señaló que “con la propuesta, la diferencia por inflación entre octubre de 2019 y este año será del 17,52%». Además, destacó «el 90% de las cuarenta asambleas de sindicatos y consultas que se hicieron en todo el país rechazó el 7%. En este momento (por la mañana del miércoles) el Congreso de CONADU no comienza a deliberar por diferencias en las acreditaciones, están muy ajustados para aprobarla.”.
Si se analizara la evolución del salario de los docentes universitarios desde diciembre de 2016 a esta parte, y si se aceptara el incremento del 7% para lo que resta del año, a diciembre de 2020 la caída del poder adquisitivo del salario de la categoría testigo de ayudante de primera con dedicación semiexclusiva y cinco años de antigüedad, alcanzará un 21% en la medida en que se registró un aumento acumulado del 214% contra una suba de precios acumulada de 281%.