Este jueves a las 11 de la mañana se reunirá la Comisión Nacional de Trabajo en Casas Particulares en la sede de la avenida Alem del Ministerio de Trabajo. Allí participan representantes de algunos de los sindicatos del sector, las cámaras empresarias y funcionarios del ministerio de Trabajo que cuentan con la mitad de los votos y poder de desempate.
La reunión buscará establecer el aumento para el nuevo tramo que complete el acuerdo 2022-2023 que, al momento, acumula una mejora del 70% desde mayo a noviembre de este año. En agosto se había acordado un nuevo tramo de cuatro cuotas del 9% para los meses de agosto a noviembre que había agregado un 36% al 34% que ya habían acumulado en los meses previos.
En la actualidad el haber inicial para la categoría mínima se encuentra en los $60.544 para una jornada semanal de 40 horas o, en caso de tratarse de trabajo por hora en una jornada inferior a las 24 horas semanales, en $493 la hora.
El antecedente del acuerdo sellado el martes en el Consejo del Salario Mínimo, en el cual se adicionó un 20% acumulativo al acuerdo vigente hasta el mes de marzo totalizando una mejora del 110% para el período anual, oficia de referencia y augura un incremento del mismo orden que debería adicionar el equivalente a un 40% con relación al haber de abril de 2022.
Sin embargo, el actual salario no llega siquiera a cubrir la Canasta Básica Alimentaria (CBA) para una familia integrada por dos adultos y dos menores que, en octubre, llegó hasta $62.105 y sirve para eludir una situación de indigencia.
Por eso el Sindicato de Trabajadoras de Casas Particulares (SiTraCP) que se movilizará mañana a la cartera laboral exige un incremento de emergencia del haber mínimo del sector superior al 100% y de una sola vez para acercarlo al valor de la Canasta Básica Total (CBT) que mide el umbral de la pobreza y llegó en octubre a los $139.737.
Según datos oficiales del INDEC, el sector de trabajadoras de casas particulares, es el que sufre el mayor porcentaje de informalidad que roza el 67%. La Cuenta de Generación de Ingresos e Insumos de mano de Obra del INDEC del segundo trimestre de este año reveló la existencia de 1,5 millones de trabajadoras no registradas contra apenas un millón de empleadas y empleados registrados en el sector.