El índice de precios al consumidor subió 4,7% en marzo, informó este martes el Indec. De esa manera, el aumento acumulado en los últimos 12 meses llegó a 54,7% y en lo que va de 2019 fue de 11,8%. El dato es de alto impacto político, porque consolida un piso cada vez más alto para la inflación justo cuando comienza a perfilarse la campaña para las elecciones presidenciales.

El empujón a los precios, el más fuerte desde octubre, fue dado en gran parte por el rubro Alimentos y Bebidas, el de mayor ponderación del índice, que subió 6%. Es un ítem que tomó una dinámica imparable en los últimos meses, ya que viene creciendo mucho más que los demás bienes y servicios: en comparación con marzo del año pasado subió 64%, casi diez puntos más que la canasta promedio. Se trata, además, de un rubro sensible para los sectores socioeconómicos más bajos, que concentran sus consumos en ese tipo de artículos.

Otros dos capítulos tuvieron fuerte impacto por cuestiones estacionales: Educación aumentó 17,9% y Prendas de Vestir y Calzado lo hizo 6,6%. Transporte subió 4,4% en el mes, pero acumula el mayor incremento interanual entre  todos los sectores relevados (67,5%) por las reiteradas actualizaciones de tarifas en trenes, subte y colectivos. Alimentos lo sigue en la lista, con el 64% de aumento en los

El gobierno ya venía manejando proyecciones altas para este mes, incluso por encima de las consultoras privadas que hablaban de algo más de 4%. El presidente Mauricio Macri había anticipado “este pico que tendremos en marzo”, con la esperanza de que pronto retome la línea descendente. Con todo, la noticia es muy mala para las aspiraciones oficiales de concentrar su estrategia en tener frenado el dólar como único frente de batalla.

La relación entre la divisa y los demás precios de la economía sigue siendo muy estrecha. El anterior pico inflacionario se dio entre septiembre y octubre, cuando los precios aumentaron 6,5% y 5,4% respectivamente, reflejando el impacto de una devaluación de más de 30%. Esta vez a la suba del dólar (de $ 38 a $ 44 entre febrero y marzo, aunque con muchos altibajos) se sumaron los ajustes en las tarifas de gas, electricidad, combustibles y peajes autorizados por el gobierno, cuya inercia podría prolongarse por un par de meses más.