Efectivos de la división antifraude del Departamento de Delitos Económicos de la Policía Federal (PFA) e inspectores de la Administración Federal de Ingresos Públicos (AFIP) y la Aduana decomisaron este miércoles US$ 800.000 en efectivo durante dos operativos de fiscalización en «cuevas» de distintos puntos de la ciudad de Buenos Aires.
En el primero de los procedimientos se llevó a cabo en la peatonal Florida al 300, en el microcentro porteño, y permitió la detención de dos personas mayores de edad de nacionalidad argentina, quienes llevaban el dinero entre sus ropas.
Intervienen en el caso el Juzgado Nacional en lo Criminal y Correccional Federal 8 a cargo del Dr. Martínez de Giorgi quien responde a las consultas de la policía y ordenan los procedimientos, según explicaron a Télam fuentes de la investigación.
En simultáneo, se desarrolló otra recorrida por parte de los agentes fiscalizadores en la peatonal Lavalle, al tiempo que tenía lugar otro operativo de saturación en el barrio porteño de Palermo, con mismos fines.
Un segundo operativo con resultado exitoso se registró en la calle Montañeses al 2200, en el barrio porteño de Belgrano, donde la Policía Federal detuvo a tres adultos de nacionalidad china, que fueron vistos mientras realizaban movimientos que llamaron la atención de los efectivos. Al ser requisados, se les detectó que ocultaban fajos de dólares escondidos y adosados sobre sus cuerpos.
Las primeras informaciones al respecto indicaban que el monto secuestrado en el operativo de la calle Montañeses ascendía a 700.000 dólares, aunque durante esta tarde se avanzaba con el conteo del dinero ante testigos en el lugar del hecho.
Un tercer operativo se dispuso tras el hallazgo de una mochila con dinero y anotaciones con direcciones en un bar céntrico ubicado en la Avenida Corrientes. Fuentes consultadas por Télam señalaron que tras la constatación de los domicilios agendados en las anotaciones de la persona requisada en el bar, se decidió avanzar con nuevos allanamientos en el microcentro porteño.
Los operativos se desarrollan de acuerdo a un plan de saturación delimitado según el mapa del delito que identifica posibles lugares en lo que se sospecha se realizan operaciones no oficiales de cambio de divisas, de acuerdo a lo que se determinó previamente en servicios de prevención.