La decisión del gobierno nacional de otorgar dos bonos por única vez de $ 1500 cada uno junto con los haberes de abril y mayo para los jubilados que ganen menos de $ 30.856 no calmó las aguas del debate sobre la aplicación de la nueva movilidad jubilatoria.
Por caso, el defensor de la Tercera Edad, Eugenio Semino, argumentó que “hablar de dos bonos para abril y mayo de 1500 pesos es 50 pesos por día”. El especialista también cuestionó el corte a partir del cual no se otorgará el bono: “No entiende el motivo”, indicó.
Según Semino, “la canasta de un jubilado con vivienda propia en octubre del año pasado era de 50 mil pesos”. La cifra se encuentra bastante por encima de la jubilación mínima que, con el aumento del 8,07%, pasará a ser de $ 20.572 entre abril y junio, cuando se aplicará un nuevo ajuste. El haber base no incluirá los bonos de 1500 pesos.
El gobierno nacional impulsó una nueva movilidad jubilatoria sobre la base del incremento de los salarios y de la recaudación tributaria de la Seguridad Social. Desde los sectores vinculados a la tercera edad, entre ellos el propio Semino, se advirtió que en un contexto de elevada inflación se corría el riesgo de que los haberes quedaran por debajo de la carestía. La primera prueba de la nueva movilidad así lo muestra. El aumento esperado para abril será inferior en varios puntos porcentuales a la inflación del primer trimestre del año, que se calcula en torno del 12 por ciento. «