Los fabricantes de autopartes de Córdoba informaron que las automotrices radicadas en esa provincia recortaron sus pedidos entre un 20% y un 40% para lo que resta del año y encendieron todas las alarmas en un sector que emplea a unas 15 mil personas en el territorio mediterráneo.
La Cámara de Industriales Metalúrgicos y de Componentes (CIMCC) local informó sobre la situación de las empresas que trabajan en relación directa con las empresas Fiat, Renault/Nissan, Volkswagen, Iveco y General Motors, que está establecida en Rosario, Santa Fe.
El mensaje expresó “profunda preocupación y alerta frente a las suspensiones y paradas de producción llevadas a cabo por las terminales que trabajan en Córdoba y otras provincias, durante algunas semanas del mes de septiembre, octubre e incluso casos de cierre total entre noviembre y enero”.
Y advirtió: “Desafortunadamente, la gravedad de esta situación provocará que las autopartistas locales deban adecuar sus niveles de producción a los volúmenes de trabajo de las terminales”.
El llamado de atención de los cordobeses está en juego con el panorama que pintaron otros autopartistas el martes último a propósito de la actividad en Buenos Aires.
El gerente de la cámara, Pablo Camacho, aseguró que “por ahora no hay una amenaza de cierres inminentes ni de despidos” en las provincia del centro del país pero indicó que los proveedores de las automotrices van a solicitar el recurso de los Repro, un instrumento del Estado para asistir a los trabajadores de las empresas que pueden probar inconvenientes para cumplir con la totalidad de los salarios.
La parada se vislumbra difícil teniendo en cuenta que el gobierno de Cambiemos fue reduciendo desde 2015 la incidencia de esa “ayuda” de la administración pública. Consciente de este detalle, la CIMCC acompañará ese pedido con otros, como la posibilidad de adherir a procesos preventivos de crisis, pero apuntó que dada la situación: “Puede pasar que el Ministerio de Trabajo tenga que reinstalar los Repro. Si es algo que permite dar soluciones lo van a volver a poner. Depende de cómo se precipiten determinadas situaciones”.
Mal momento
El reclamo de los autopartistas cordobeses coincidió con una encuesta de la Unión Industrial de Córdoba, que se publicó también este miércoles. El 86,81% de los industriales consultados reconoció que su actividad cayó o se estancó en relación a 2017.
En concreto, un 58,24% dijo que su actividad fue negativa a la par de un 28,57% que reconoció que se mantuvo estable mientras que apenas el 12,64% habló de un incremento.
El panorama agrega que para el 45,45% la cadena de pagos se extendió, acrecentando un problema generalizado de la industria en todo el país. Y el período de extensión mayoritario fue de 60 días (39,74% de los consultados).
Metal pesado
La Asociación de Industriales Metalúrgicos (ADIMRA) informó que su actividad cayó en julio (último dato cuantificado) un 2,1% respecto al mismo mes del año pasado con una caída del empleo del 1,8% interanual.
Según el comunicado de Adimra en el séptimo mes del año las empresas priorizaron “la reducción laboral: más de la mitad de los empresarios indicaron que redujeron horas extras y un 17% señalaron una reducción de la jornada laboral”.
Y en el mismo sentido advirtió que “llamó la atención el alto porcentaje de empresas que solicitaron algún programa de recuperación productiva o proceso preventivo de crisis”.
En Córdoba la industria metalúrgica cayó 2,3% interanual en julio.