El próximo miércoles, el Instituto Nacional de Estadística y Censos (Indec) dará a conocer la cifra de pobreza relativa al primer semestre de este año. Sin embargo, ya están disponibles los informes que permiten inferir los resultados que dan cuenta del impacto de la pandemia y la cuarentena. En ese sentido, las proyecciones privadas indican que la pobreza ya habría alcanzado a más del 45% de la población. De esa manera, serían más de 20,5 millones de personas las que viven en hogares que no logran  reunir los ingresos necesarios para cubrir el costo de la Canasta Básica Total. De ellos, casi cinco millones cayeron en esta situación entre abril y junio de este año.

Durante la semana que pasó, se publicaron los datos de Distribución del Ingreso del segundo trimestre y ya se conocían, entre otros, los relativos a la evolución de la Canasta Básica Total que establece el ingreso mínimo que deben reunir las familias para no caer en esa situación. Lo mismo con relación a la indigencia, que se define a partir de la denominada Canasta Básica Alimentaria. También se conocieron otros informes que dan cuenta de una caída abrupta del empleo y de la actividad.

A partir de esos datos, las  estimaciones privadas coinciden en que, la cifra que dará a conocer el INDEC este miércoles, se ubicará en alrededor de un 40 por ciento. El dato tiene una agregación semestral para eludir la estacionalidad trimestral que sufre el ingreso de los hogares a partir de la percepción del aguinaldo en dos de los cuatro trimestres. Esa agregación, por lo tanto, guarda sentido en condiciones normales.

Sin embargo, en el contexto actual, el impacto de la pandemia se hizo sentir especialmente en el tercer trimestre generando un comportamiento de la variable pobreza marcadamente heterogéneo durante el transcurso de esos seis meses.

Es que, según datos del mismo INDEC, la actividad económica en el segundo trimestre sufrió un derrumbe estrepitoso que, medido en términos interanuales, implicó una caída del 26% en abril, de un 20,5% en mayo y de un 12,3% en junio. Si bien es cierto que durante los primeros tres meses del año la dinámica también había sido contractiva (acumuló un retroceso del 5,4%) el salto a partir de abril resultó muy marcado.

De hecho, según otro de los informes recientes del Indec, el de Mercado de Trabajo, durante el segundo trimestre cuatro millones de personas salieron temporalmente del mercado laboral provocando que la tasa de actividad cayera hasta un 38,4%, en una caída histórica de 9,3 puntos con relación al mismo período del año anterior. Por eso, el desempleo, que técnicamente subió al 13,1% (10,6% en 2019 y 10,4 en el primer trimestre de 2020), en realidad, si se tomara de base la tasa de actividad del primer trimestre, superaría el 29 por ciento.

Desde el punto de vista del ingreso, el jueves se supo que durante el trimestre de plena cuarentena la distribución se agravó al punto en el que el 10% más rico de la población acumula 25 veces los ingresos que percibe el 10% más pobre. Cuando, durante el primer trimestre, esa relación era de 21 veces y para el mismo trimestre del año anterior, de 20.

Del mismo informe surge, por ejemplo, que el 55% de los hogares acumulan ingresos totales inferiores a los $ 43.764, cuando la canasta básica total en junio se ubicó en los 43.811 pesos. El dato sirve para reflejar parte de la situación aunque por la diversa composición de los hogares no puede ser asimilado directamente con la pobreza.

Dicho esto, diferentes estimaciones privadas dan cuenta de que en el segundo trimestre la pobreza habría sufrido una estampida. Por caso, según el Instituto de Pensamiento y Políticas Públicas (IPyPP), si bien el resultado para el semestre debería alcanzar un 40,3%, a la hora de discriminar cada uno de los trimestres resulta que, durante los primeros tres meses del año esa situación alcanzaba al 34,6% de las personas mientras que el promedio durante los meses que van de abril a junio, el 46% de los argentinos se ubicó debajo de la línea de pobreza.

Por su parte, Martín Rozada, Director de la Maestría en Econometría de la Universidad Torcuato Di Tella, estima que el dato semestral del Indec alcanzará un 39 por ciento. Coincide en que el primer trimestre arrojó un 34,6% de pobres mientras que, en el segundo trimestre, esa cifra se habría elevado hasta un 43,2% que, por margen de error estadístico, podría llegar a un 45,1 por ciento.

Si se tomara en cuenta el dato coincidente de pobreza del primer semestre de 2020  que llegó hasta un 34,6% y promediando las estimaciones privadas en un 45%, resulta que, durante los primeros tres meses de cuarentena,  los que van de abril a junio se produjeron 4.719.183 nuevos pobres en la Argentina. «

HISTORIA

Récord. Según los registros del Indec, que comienzan en 2003, fue allí cuando la pobreza llegó a su punto más alto, afectando a un 54% de la población. Esa cifra se redujo al 47% para el segundo semestre de aquel año. Si se confirmara el 45% de ahora, sería la tasa más alta desde entonces.

Apagón. Entre 2013 y 2016 los datos de pobreza se discontinuaron por el diferendo alrededor de la presunta manipulación de los datos de inflación. De hecho, la última información disponible de 2013 arrojaba un inverosímil 4,7 por ciento.

Nuevo comienzo. El primer dato publicado tras el «apagón» fue el del segundo semestre de 2016, que arrojó un 30,3% de pobreza y que abrió un debate sobre la herencia que había dejado el gobierno de CFK.

Presente. El último informe da cuenta de un 35,5% de pobres a fines de 2019. Entre los niños de 0 a 14 años, sin embargo, llega al 52,3 por ciento.