En abril de 2017 miles de docentes santacruceños llevaban adelante una huelga que duró más de cien días por el atraso en el pago de los salarios a docentes, estatales, judiciales y jubilados en la provincia y por la actualización de sus haberes. Las clases, luego de una profunda movilización, comenzaron recién en el mes de agosto cuando finalmente se obtuvieron parte de los reclamos.
Dentro de las decenas de medidas que se sostenían a lo largo de toda la provincia, el 21 de abril por la noche, centenares de docentes que se manifestaban en la gobernación decidieron de manera espontánea dirigirse al domicilio particular de la también entonces gobernadora Alicia Kirchner, situada a metros de la casa de gobierno, para reclamarle en forma directa por el pago de sus salarios. Allí la gobernadora cenaba con su cuñada, la entonces ex presidenta Cristina Fernández de Kirchner.
En esas circunstancias fue que algunos de los manifestantes llegaron hasta los jardines frontales de la residencia. La protesta fue disuelta mediante una fuerte represión policial que se cobró decenas de heridos y hospitalizados.
Cuatro dirigentes sindicales del gremio Adosac, en aquel momento, fueron procesados en una causa caratulada como “invasión de domicilio”. Sin embargo, seis años después y cuando la causa estaba a punto de prescribir, la cámara criminal dio lugar en un fallo por mayoría al pedido del fiscal subrogante Federico Heinz para modificar la carátula de la causa. A partir de ahora, los dirigentes sindicales están acusados de “intento de femicidio” o, para el caso de las mujeres, de “intento de asesinato calificado” a la gobernadora.
De esta forma Juan Manuel Valentín, Gabriela Ance, Claudio Wasquin y Diego Barrionuevo en nombre de la nueva caratula, podrían ser encarcelados hasta tanto se lleve adelante el juicio.
El cambio de carátula se da, a la vez, en el marco de un nuevo plan de acción por reclamos salariales de la docencia santacruceña que rechazan el cierre de una nueva paritaria por la vía de un decreto y exigen la apertura de la paritaria docente para discutir un incremento del salario que, hoy, se ubica en los $135 mil. Por ese motivo este año también acumulan ya 59 días de huelga.
En diálogo con Tiempo Argentino, Juan Manuel Valentín quién además de ser representante sindical de los docentes ahora es candidato a gobernador por el Frente de Izquierda, señaló que “la gobernadora ha montado una causa en contra de cuatro trabajadores por reclamar que se nos pagaran los salarios adeudados. Es lo mínimo que debe cumplir un gobierno. Hoy los salarios están a un 62% del valor de la línea de pobreza. Una maestra cobra $135 mil contra $217 mil que vale la canasta básica».
Para el dirigente «estamos en el día 59 de huelga y ahí deciden el cambio de carátula para intentar meter presión y miedo a los trabajadores que reclaman por sus salarios. Intentan culparnos de intento de femicidio a la gobernadora y a la actual vicepresidenta. No tienen ningún sustento jurídico ni ninguna prueba. Es una causa armada que ya debió prescribir. Sin embargo, para eludir la prescripción, el kirchnerismo ha forzado la figura de funcionario público para utlizarla contra trabajadores en una protesta. Somos docentes, no funcionarios. Solo lo pueden llevar adelante por el Partido Judicial que montaron en la provincia. De lo mismo que se queja Cristina a nivel nacional lo usa en la provincia de Santa Cruz contra los docentes que defienden sus salarios y sus familias. No se puede intentar apagar el conflicto social con persecución, judicialización y represión”.