La AFA es una mamushka que en su interior contiene una disputa detrás de otra. En el medio de la crisis que retrasa la vuelta del fútbol, la nueva muñeca es el borrador de estatuto que la FIFA propone para que sea aprobado antes de elegir a un nuevo presidente. «Es un copiado y pegado de un texto modelo», dice Alberto Lecchi, presidente de Temperley, sobre el documento que, tal como llegó desde Suiza, le abre las puertas a las sociedades anónimas al quitar, como hasta ahora, la condición de asociación civil sin fines de lucro para ser miembro de la AFA. No es la única disputa sobre el texto que los clubes recibieron el 23 de enero y que hasta mañana pueden devolver con sugerencias. «Con el verso de que viene desde la FIFA, nos quieren contrabandear algunas ideas», resume un dirigente del Ascenso que, desde hace tiempo, asoma como foco de resistencia ante los avances del gobierno. «No es la panacea ni el horror», agrega otro dirigente, más conciliador, sobre el borrador que, al menos, abre siete interrogantes.
 
1 El nuevo estatuto achica la cantidad de representantes en la Asamblea, que tendrá 46 delegados, entre los que incluye, con un miembro cada uno, al fútbol femenino, al Futsal, al fútbol playa, a los árbitros, a los jugadores y a los entrenadores. La nueva Asamblea le da una mayoría virtual a la Primera, con 22 votos, y le recorta poder al Ascenso y al Interior, cuyas categorías y ligas tendrán 18 delegados. A la Primera le alcanza con conseguir dos aliados para ganar cualquier votación.

«Hay cosas buenas que modernizan el estatuto. Pero se retrocede en la vida democrática de la AFA: en lugar de ampliar derechos, los restringe», remarca Daniel Mariatti, presidente de Argentino de Rosario, equipo que estudió los estatutos de México, España y Brasil antes de tomar una postura.

2 El Comité Ejecutivo se reduciría a 15 miembros y al menos uno tendrá que ser mujer. Antes del ingreso del Comité de Regularización, estaba integrado por todos los clubes de Primera más los representantes del Ascenso y el Interior. Con la nueva conformación las decisiones cotidianas sobre el fútbol (las que no requieran de la Asamblea) quedarían en pocas manos, lo que podría, incluso, despertar especulaciones, sobre todo, entre los clubes de Primera. De hecho, el texto habla de «cuatro miembros ordinarios» pero no especifica a qué categoría pertenecerían.

Este es otro de los puntos observados por el Ascenso, que entiende que pierde representación en los principales órganos de gobierno de Viamonte 1366. Esta semana sumó aliados para esa batalla. «Se tiene que buscar algo más equilibrado, no puede haber tanta diferencia entre categorías», sostiene Héctor «Yoyo» Maldonado, secretario general de Independiente que, como Boca, Huracán y Racing, camina junto a Claudio «Chiqui» Tapia.

3 «Antes de la elección o reelección, deberán someterse a un examen de integridad, efectuado por el Tribunal de Ética», dice el inciso 4 del artículo 42 en el borrador. El Tribunal de Ética sería uno de los órganos jurisdiccionales de la AFA junto con el Tribunal de Disciplina y el Tribunal de Apelación. A su vez, habrá un Código de Ética. Pero, ¿cuáles serían los criterios para que un Tribunal vete a un eventual candidato?

4 El secretario general y el tesorero quedarán por afuera del Comité Ejecutivo. Aunque podrán participar de las reuniones, donde tendrán voz, pero no voto. Y serán cargos rentados. Al secretario general lo designará el Comité Ejecutivo, a propuesta del presidente, y «sobre la base de un contrato legal privado y deberá tener la formación profesional necesaria». Un gerente. El temor que expresan algunos dirigentes que estudiaron el borrador es que, finalmente, sea una figura con más poder, incluso, que otros miembros del Comité Ejecutivo.

5 Entre las tareas del Comité Ejecutivo, detallados en el artículo 35, se encuentra el de la tercerización de decisiones: «Delegar funciones del ámbito de su competencia en otros órganos de la AFA a terceros». Suena peligroso. ¿A quién y por qué debería delegar sus decisiones el Comité Ejecutivo?

6 «En todo caso, ninguna persona física o jurídica (incluidas las empresas matrices y filiales incluidas) controlará más de un club o agrupación si esto atenta contra el juego limpio en cualquier partido o competición», dice el artículo 18. ¿Quién determinará qué atenta contra el juego limpio? Aunque se diga lo contrario, esa redacción imprecisa deja abierta la posibilidad a que una empresa pueda controlar más de un club. En México, por ejemplo, ocurre con Televisa y el Grupo Pachuca. De cualquier modo, es una discusión que podría quedar descartada si se elimina la apertura a «toda persona jurídica que desee convertirse en miembro de la AFA», la llave para del borrador para el fútbol privado, una opción que la mayoría de los clubes ya rechazó.
 
7 En el artículo 84, el anteúltimo del borrador, titulado «Disposiciones transitorias», define que el Comité de Regularización ejercerá como comisión electoral “ad ínterim hasta la primer (sic) Asamblea electiva subsecuente a la ratificación de estos estatutos». «En esta Asamblea electiva –continúa– se ratificarán a los integrantes de la Comisión electoral, de los órganos jurisdiccionales y de la Comisión de Auditoría y Conformidad propuestos por el Comité de Regularización de la AFA.» Es decir, con una redacción confusa, le daría al Comité de Regularización la potestad de proponer nada menos que los órganos jurisdiccionales para los próximos años. Le da poder.

Las respuestas del borrador girado en enero entrarán mañana al correo de la AFA. El asunto de los mails enviados por el Ascenso sería uniforme: después del plenario en el tercer piso de Viamonte 1366, consensuaron, entre otras cosas, devolver una propuesta única. El núcleo central del texto será la ratificación de las asociaciones civiles sin fines de lucro como forma de organización de los clubes y la ampliación de los integrantes tanto de la Asamblea como del Comité Ejecutivo. «La pérdida de representavidad está atada a no recibir dinero en un futuro», advierte Mariatti, sobre el efecto concreto. «Está todo bien, tenemos que cumplir lo que manda lo FIFA», sostiene José Vignatti, presidente de Colón.

«Todo sigue siendo bochornoso y los únicos perjudicados somos los equipos chicos», remarca Lecchi. «La madre de todas las batallas es la representativad», opina un dirigente de Primera que ganó terreno en el último año. A diferencia del Ascenso que quiere resolver todo en un asamblea (televisación, estatuto y elecciones), este grupo pide seguir el calendario de la FIFA y primero ordenar la economía con la rescisión del Fútbol para Todos y el ingreso de un nuevo jugador. Pese a las tensiones, confían en que se cumplirá el cronograma sin retrasos. En el medio, el gobierno hará otro intento –otra apretada– para privatizar el fútbol. Cuenta con el poder del dinero, el factor con el que cree que todo lo puede.