El jueves último la AFA presentó el fixture para la Superliga que comienza esta semana. La gran novedad fue que cada partido hasta fin de año ya tenía asignado un día y un horario. «Este es uno de los aportes que nos comprometimos a hacer cuando asumimos la gestión: armar un fixture que nos diera previsibilidad», dijo el Chiqui Tapia, presidente de la AFA, junto a Mariano Elizondo, mandamás de las Superliga, quien evalúa no solo aportar previsibilidad en los próximos armados, sino también cambiar el modelo de fixture para apoyarse en la ciencia antes que en el azar, como hasta ahora.
Tanto Elizondo, como su vicepresidente, Jorge Brito, entablaron charlas con Guillermo Durán, director del Instituto de Cálculo de la Universidad de Buenos Aires, cuyo equipo diseña los calendarios de la Primera División de Chile y de las Eliminatorias Sudamericanas. «El fixture que terminaron aprobando es bastante mejor que el primero que habían dado a conocer, pero igual tiene falencias, y las falencias tienen que ver con el sistema que se usa, que tiene muy baja potencialidad para poder incorporar las condiciones razonables que uno le pondría al fixture», analiza Durán, quien sostiene que se pueden incorporar un montón de cuestiones para armar «un modelo que sea más equitativo».
Doctor en Matemáticas y cuervo de alma, Durán dice que, al ser torneos de una sola rueda, habría que revisar cómo se alternan las localías, no solo dentro del mismo torneo sino también con respecto a los anteriores campeonatos. Por ejemplo, los últimos tres partidos entre Vélez y San Lorenzo se jugaron en el Nuevo Gasómetro. Además, dice que se le podría asegurar una localía contra River o contra Boca a cada equipo, que las visitas de los grandes a ciudades turísticas coincidan con las vacaciones o que se tengan en cuenta los recitales y la seguridad a la hora de modelar el sistema.
«Todas las condiciones se pueden incorporar al modelo, hay que pensar cuáles son las más lógicas, las más razonables, y sumarlas. Obviamente cuantas más cosas uno le pide, es más posible que llegue a una situación de infactibilidad, y ahí tiene que decidir qué prioriza. Puede ser que tengamos que relajar alguna condición, pero en principio cumplimos con la gran mayoría», explica sobre sus experiencias en Chile y en Conmebol.