Paula Pareto se convirtió en la primera mujer argentina de la historia en colgarse la medalla de oro del pecho. La judoca argentina, de treinta años, se consagró campeona olímpica tras vencer en la final a la coreana Bokyeong Jeong. «Todas las personas que me vinieron a ver estaban más convencidas que yo que esto se iba a dar. Estoy más que feliz. Creo que la fe y la buena energía fueron las claves», enfatizó la Peque, emocionada hasta las lágrimas.
Ya es leyenda la doctora Pareto, que además de ser la única mujer de la historia nacional en conseguir dos medallas olímpicas por deportes individuales, se recibió de médica hace dos años. Pura emoción, puro orgullo. Pareto era una de las máximas esperanzas, por sus antecedentes de la medalla de bronce en 2008 y por haber sido campeona del mundo en su categoría en el Mundial de Kazajstán en 2015 y campeona panamericana en Río ese mismo año. Y cumplió: el primer día de competición le dio la mayor alegría posible al deporte argentino.