Dion Waiters es un escolta de 28 que acaba de ser campeón de la NBA con Los Ángeles Lakers. Más allá de ser un buen amigo del astro Lebron James no tuvo mucha incidencia dentro de la cancha, apenas unos minutos. Aunque su historia fue una de las tantas particularidades que entregó la temporada de la NBA, que a causa de la pandemia se cerró en burbuja sabitaria de Disney, en Orlando. Waiters comenzó la competencia como jugador de Miami, el otro finalista, que finalmente cayó ante Los Ángeles. Tres conductas inapropiadas lo llevaron a romper el contrato con los Heat. Una de ellas fue el 7 de noviembre pasado: en un vuelo comió unas golosinas de marihuana, con alto contenido de THC, que lo llevaron al desmayo. Tras salir de Miami tuvo un breve paso por Memphis Grizzlies y luego recaló en Los Ángeles, donde fue campeón.
Según dejaron trascender distintos medios estadounidenses, durante los tres meses y medio de aislamiento en Orlando para terminar la temporada 2020, la NBA miró para un costado con el consumo de marihuana de sus deportistas. El sitio birtánico The Athletic, publicó que los organizadores eran conscientes de que, sin familias ni acompañantes, las consolas o los hobbies tradicionales no alcanzarían para entretener a los jugadores. Ahora, la prensa señala que en el convenio colectivo de trabajo que negocia el sindicato de jugadores para la próxima temporada, el cannabis dejará de estar penalizado.
En Estados Unidos, se sabe, la marihuana es legal en muchos estados. Incluso, es una industria que crece. Y en la que entran muchos exdeportistas como inversores o patrocinadores, desde el exboxeador Mike Tyson al exbasquetbolista Cliff Robinson. “En mi equipo todos toman un café, o salen a beber vino después de los partidos. La marihuana debería estar a ese nivel. No es dañina para nadie. Creo que ni siquiera deberiamos estar hablando de esto”, dijo a comienzos de año Kevin Durant, entrevistado por los exjugadores Matt Barnes y Stephen Jackon, quienes admitieron haber fumado cannabis y ahora realizan un podcast titulado All The Smoke.
La lista de deportistas estadounidense con vínculos con las drogas en las últimas tres décadas es extensa. La NBA es la única de las grandes competencias estadounidenses que mantiene a la marihuana en la lista de sustancias prohibidas. Este año, la NFL de fútbol americano se sumó a las otras ligas que no suspenden a los jugadores que consuman cannabis, como la MLS (fútbol), la NHL (hockey sobre hielo) y la MLB (béisbol). A partir de la próxima temporada, ya no sería la excepción.