Un poco más de una hora después del golpazo en el debut ante Arabia Saudita, Lionel Scaloni elogió mirar lo que se vendrá, lo que asoma en el camino del Grupo C, el ahora partido crucial ante México. «Nos vamos a levantar», repitió varias veces el entrenador de la selección después del inesperado 1-2 del estreno.
Esto recién empieza acaso podría ser la frase que resume a la conferencia posterior al final de la racha de 36 partidos invictos. «Mejor no podíamos llegar a esta competencia. Pero el fútbol es así y el Mundial tiene otras cosas. Se perdió pero nos vamos a levantar y a pelear los próximos dos partidos», evaluó el entrenador.
Scaloni evitó explicaciones vinculadas a las lesiones o el desgaste de los jugadores. «En el entretiempo dijimos que era un partido extraño y estábamos solo 1 a 0», contó en la rueda de prensa en la que valoró el juego del rival. «Sabíamos cómo jugaba Arabia. Preparamos el partido sabiendo que ellos salían con una defensa adelantada. Los offside fueron milimétricos», dijo y anticipó que la gran mayoría de los futbolistas terminaron el partido sin problemas físicos, aunque falta el reporte médico.
«Es difícil asimilar. No queda otra que levantarse y ganar los partidos. Es un día triste, pero hay que seguir», admitió Scaloni y valoró el nivel de Enzo Fernández, Lisandro Martínez, Julián Álvarez y Marcos Acuña, los cuatro cambios que llegaron desde el banco. No hubo modo de revertir esos tres minutos fatales. «Nos vamos a levantar, vamos a seguir y ganar los próximos dos partidos», repitió el entrenador, en modo confianza ante la adversidad.
