Cinco días después de la derrota ante River en la final de la Copa Libertadores, el presidente Daniel Angelici y el entrenador Guillermo Barros Schelotto dieron una conferencia de prensa en La Bombonera para confirmar lo que ya era un hecho: el del Bernabéu fue el último partido del Mellizo como entrenador xeneize.
“Le quiero agradecer a la dirigencia, a los empleados, a los jugadores y sobre todo al hincha por cómo me trató estos tres años más allá de ganar o de perder. Más allá del dolor por no haber ganado la Copa Libertadores me voy con la tranquilidad de haber dejado todo. Al hincha le digo que lo viví como entrenador y como jugador: son increíbles”, aseguró el técnico, que evitó que haya preguntas porque “quiero irme en paz, no quiero tener razón”.
En tanto, Daniel Angelici, que en la semana había sido insultado durante el Día del Hincha de Boca, dio un discurso más contundente. “Estoy poniendo la cara en este momento de gran tristeza. Estoy golpeado, tengo mucho dolor pero no me voy a tomar un solo día de licencia ni me voy a ir de vacaciones. Estoy más fuerte que nunca para trabajar hasta el último día de la gestión. Que los oportunistas no gasten energía en poner banderas porque el año que viene los verdaderos dueños del club van a decidir quién sigue al frente del club”, aseguró para empezar a calentar el año electoral.
Sobre la despedida de Barros Schelotto, el presidente mantuvo una línea más protocolar: “Tengo la tranquilidad de haber traído un cuerpo técnico que siempre quise. Porque como jugador siempre nos dio satisfacciones y por la calidad humana y profesional que demostró. Quiero agradecerle a Guillermo y a todo el cuerpo técnico por el bicampeonato logrado y por haber llegado hasta la última instancia de la Copa Libertadores. Nadie más que nosotros quería ganar esta final, pero no se pudo. Siento que lo mejor es arrancar el año con un cambio”.
