En vísperas del regreso del público a los estadios del fútbol argentino, el gobierno de la provincia de Santa Fe realizó este martes dos inspecciones preventivas en los estadios Marcelo Bielsa, de Newell’s, y Gigante de Arroyito, de Rosario Central. Allí la Policía de Santa Fe neutralizó una sala búnker de la barrabrava leprosa, en el Parque Independencia de Rosario.
Efectivos del Grupo de Operaciones Tácticas (GOT), de Seguridad Rural Los Pumas y de la Policía de Acción Táctica (PAT) inspeccionaron el estadio, donde con herramientas neumáticas derribaron las puertas blindadas de una sala búnker a la que sólo accedía la barra brava de Newell’s. «Esta instalación, ubicada frente a la herrería del club, se trataba de una cámara blindada por una serie de puertas de hierro con varias cerraduras de alta seguridad cada una y una alarma interna con clave digital», explicó un vocero de la Fiscalía rosarina. «Las llaves y la clave de la alarma obraban solamente en poder de la barra brava, por lo que fue necesario disponer de herramientas neumáticas para demolerla», agregó.
El Subsecretario provincial de Seguridad Preventiva, Diego Lluma, quien lideró la inspección, aseguró que “el regreso del público a los estadios requiere acciones contundentes de afirmación de la autoridad legal para mantener a los violentos lejos de los estadios». Los contenidos hallados en la sala-búnker de la barra brava quedaron bajo custodia de la División Judiciales de la Jefatura de la Unidad Regional II. «El resto de los objetos podrán ser entregados por las autoridades del club en la medida en que lo reclamen como propios», indica la notificación oficial.
Completada la inspección en Newell’s, la comitiva se desplazó al Club Rosario Central para «notificar las medidas de seguridad indispensables, como remover antes del 1 de octubre la pintada ubicada detrás de uno de los arcos con la consigna ‘Los Guerreros’, en referencia a la barra brava de Rosario Central y la estructura de caños que ocupa la parte superior de la popular». Además, la inspección de seguridad preventiva ordenó al club canalla remover de inmediato «toda pertenencia que pudiera haber de la barra brava y pudiera estar acopiada dentro del club».
Finalmente, un portavoz judicial indicó que «con asesoramiento de los especialistas técnicos de la Subsecretaría de Seguridad Preventiva, el club deberá completar la red de video seguridad para evitar que existan puntos ciegos que beneficien el uso del espacio a los violentos».