Fue el minuto fatídico de la Selección ante Croacia. A los ocho de la segunda mitad, el alud comenzó a bajar por la montaña. Wilfredo Caballero recibió un pase atrás de Gabriel Mercado, que no revestía mayores complicaciones, y el arquero pifió, elevó la pelota y la dejó en el aire, dominado por Ante Rebić: volea y gol. Pero, sobre todo, fue ese instante que dejó sin reacción a Argentina, que colocó al equipo pensando en una virtual eliminación aunque faltaba mucho (y todavía falta). No fue el primer error de Caballero en el Mundial de Rusia. Ante Islandia, esta vez con Marcos Rojo como coprotagonista, le sirvió el gol a Birkir Bjarnason, que falló. Rebić no, y Caballero, su blooper, será la imagen de la derrota de Argentina ante Croacia. Fue 3-0 en Nizhni Nóvgorod, porque siguieron los goles.
Jorge Sampaoli pasó de disponer una defensa con una línea de cuatro ante Islandia a una de tres con Croacia. La confusión se notó. Tardó casi 40 minutos el equipo argentino en hacer pie. Pero, en esa frágil estabilidad defensiva, aisló a Lionel Messi. Fue la paradoja. En ese marco cayó el gol croata. Caballero fue luego silbado por gran parte de los hinchas argentinos en el estadio. Si la escena del partido ante Islandia será la del penal que falló Messi, la del partido ante Croacia será la del pif de Caballero, elegido por Sampaoli después de la lesión de Sergio Romero. «No solamente juega bien con los pies, cuando uno elige un arquero lo elige relacionado con sus capaciones y con una relación propia de los jugadores que los rodean», había dicho el técnico después de Islandia.
Quedará esa imagen de Caballero, porque terminó en gol de Croacia, no la del arco vacío al que le erró Enzo Pérez. Tampoco las imágenes de las fragilidades defensivas al comienzo del partido, cuando los costados de Gabriel Mercado y Nicolás Tagliafico no eran bien cubiertos por Eduardo Salvio y Marcos Acuña, respectivamente. Tampoco las dudas de Nicolás Otamendi como último hombre, con campo liberado a sus espaldas, o el sacrificio de Javier Mascherano que, en concreto, siguen revelando el mal juego de la Selección. Cómo reconstruir la defensa y si atajará Caballero este martes ante Nigeria serán decisiones que deberá tomar Sampaoli en el marco de un derrumbe anímico como equipo.