Colombia fue de menor a mayor en el Grupo H. Su travesía comenzó con una inesperada caída ante Japón, pero los comandados por José Pekerman ganaron los dos partidos siguientes –Polonia y Senegal- para avanzar a octavos como el mejor de la zona. A 16 minutos del final, Yerry Mina anotó el gol de la victoria, de cabeza, frente a los africanos.
En la próxima ronda, el conjunto sudamericano se cruzará con el segundo de la zona G. Será el martes 3 de julio, a las 15, en Moscú. Hasta ese día, tendrá tiempo para recuperar a James Rodríguez que apenas pudo jugar 31 minutos por una lesión y se fue reemplazado por Luis Muriel. Será la incógnita que atravesará a Colombia estos días.
Senegal fue la contracara del combinado de Pekerman. Debutó con una victoria resonante ante Polonia, empató con Japón y se despidió del Mundial por haber acumulado más amarillas que los orientales, el otro clasificado del grupo. Ambos terminaron con los mismos puntos y goles, pero el FairPlay favoreció a los nipones que clasificaron aún perdiendo en su última presentación de la primera fase. Ni siquiera buscaron el empate ante Polonia. Sabían que Colombia les había dado una mano y decidieron no arriesgar, pasarse la pelota de un lado a otro entre los centrales. En octavos, precisarán algo más para seguir en Rusia.