Luego de que se cortara el ingreso principal a la Plaza de Mayo, a la altura de la Avenida 9 de Julio, la Policía de la Ciudad desató una violenta represión contra las personas que esperaban desde hacía varias horas despedir a Diego Maradona. La tensión fue creciendo y también se trasladó a Casa Rosada. Todo se descontroló cuando ya no dejaban pasar a la gente en la entrada de Casa de Gobierno. La gente saltó las rejas y llegó incluso hasta el patio de las Palmeras para refugiarse de los gases y los palos. 

Al féretro de Diego Maradona lo retiraron del hall central y lo movieron hasta el Salón de los Pueblos Originarios, ubicado a unos 30 metros, donde se lo mantuvo bajo llave junto a la familia, a salvo de los desbordes. A la vez, la Casa Rosada fue blindada en su perímetro por un cordón policial y un fuerte retén del cuerpo de Infantería por la entrada principal de Balcarce 50.

Unos minutos antes, la avenida 9 de Julio había sido otra zona de conflicto cuando la policía arremetió con balas de goma y gases lacrimógenos, según consigna este video del comunicador Javier Nuñez, prensa de Barrios de Pie. Varias unidades policiales en motos y camiones hidrantes se sumaron para dispersar a la gente que se había juntado en esa intersección para ingresar a la fila con destino a la Casa Rosada.

Ante el accionar policial, hubo corridas para el sur de la ciudad, para el norte y también hacia el Congreso de la Nación. Luego de varios minutos de tensión, la Policía volvió a formar el cordón para impedir el ingreso del público al velatorio de Maradona.

A unas horas para el final del velatorio, la fila de gente se extendía hasta la altura de Constitución, a casi cinco kilómetros de la Casa Rosada.