Con el anuncio oficial de que el público regresará a los estadios a partir del primero de octubre, los dirigentes trabajan en cómo aplicar los protocolos en cada uno de sus clubes mientras buscan incentivar la vacunación en los planteles de Primera División. En una reunión que se realizó la semana pasada en el hotel Hilton de Puerto Madero, los representantes de los clubes pusieron en énfasis en dos cuestiones de la situación sanitaria: la necesidad de abrir las puertas para los socios que se mantuvieron con la cuota al día en estos más de 500 días y la escasa aceptación que tuvieron los planteles a vacunarse.
Un informe del doctor Alejandro Roncoroni, secretario general de Argentinos Juniors y coordinador de la Comisión Médica de la LPF, expuso datos salientes para medir las acciones que se tomaron en los clubes contra la pandemia. El informe contaba que se realizaron 71.500 hisopados entre cuerpos técnicos y planteles de Primera División y de las categorías juveniles, y que la tasa de positividad fue muy baja. Apenas 236 muestras dieron positivas, un 0,22 % en Primera y de 0,37 % en las categorías juveniles. Para tener una idea comparativa, la tasa de incidencia a nivel país por fuera del fútbol es de 11,36 %.
El dato más llamativo del informe, sin embargo, está en los índices bajísimos de inoculaciones. Por eso los dirigentes se comprometieron a aumentar el número de futbolistas vacunados en el corto plazo. Sólo hay un 27 % de inmunizados con la primera dosis -entre cuerpos técnicos y jugadores- y un 6 % con la segunda. En juveniles -considerando las inferiores de 9na. a Reserva- la primera dosis alcanzó al 12 %, mientras que existe un 1 % con ambas dosis.
Siempre atentos a publicar sus novedades en las redes sociales, llamaba la atención que en los últimos meses los futbolistas no se hayan sumado a la tendencia de la mayoría de la población de subir su foto vacunándose. Con este informe se pudo saber por qué: aún son muy pocos los que lo hicieron. El desafío de cada club será intensificar la concientización puertas hacia adentro y aumentar esos números. Mientras todo se prepara para volver al gran momento del reencuentro de los hinchas con los estadios, los jugadores deberán empezar a poner el brazo.