Este viernes, en el Estadio Olímpico de Roma, comenzará una Eurocopa especial. No sólo porque se juega en un contexto de pandemia, o porque se trata del certamen aplazado desde el año pasado a causa de la crisis sanitaria que produjo el coronavirus. Para celebrar los 60 años que pasaron desde la primera edición del torneo continental de selecciones, la UEFA había decidido que el campeonato no tuviera una sede única sino que se juegue en distintos países para que sea “una fiesta de verano en toda Europa”. Habrá, entonces, 12 ciudades sedes, en 12 países diferentes. Cada grupo se jugará en dos estadios distintos y las semifinales y la final se disputarán en el mítico estadio de Wembley.
Los seis grupos y las seis sedes se distribuirán así.
*Grupo A (Roma/Bakú): Turquía, Italia, Gales, Suiza
*Grupo B (Copenhague/San Petersburgo): Dinamarca, Finlandia, Bélgica, Rusia
*Grupo C (Ámsterdam/Bucarest): Países Bajos, Ucrania, Austria, Macedonia
*Grupo D (Londres/ Glasgow): Inglaterra, Croacia, República Checa, Escocia
*Grupo E (Sevilla/San Petersburgo): España, Suecia, Polonia, Eslovaquia
*Grupo F (Munich/Budapest): Portugal, Francia, Alemania, Hungría
Será la segunda vez que se juegue una Eurocopa con 24 equipos, un formato similar al de la Euro 2016 que se disputó en Francia. Al igual que en este torneo, el primero y el segundo de cada grupo, así como los cuatro mejores terceros, avanzan a la ronda de octavos de final. Luego serán llaves de eliminación directa hasta llegar a la final, el 11 de julio, en Londres.
En un continente que ya parece haber superado el peor momento de la pandemia, buscando entrar en la nueva normalidad en el verano europeo, los estadios recibirán público, aunque cada ciudad puso un límite a la capacidad. Budapest (Hungría) aspira a llenar su estadio con casi 70 mil personas. En San Petersburgo (Rusia) y Baku (Azerbaiyán) el aforo será del 50%. En tanto que Sevilla (España), Roma (Italia), Amsterdam (Holanda), Copenhague (Dinmarca), Glasgow (Escocia) y Bucarest (Rumania) la capacidad permitada en sus estadios estará entre el 25% y el 33% del total. Por último, Londres confirmó que al menos para la fase de grupos y para el encuentro de octavos de final, habilitará un 25% de las gradas. Es probable que para las semi y la final, si todo marcha bien en cuanto a contagios, la capacidad se amplíe. Donde estará más restringido el aforo es en Munich, con un máximo de unos 14.500, un 20% de la capacidad total del estadio.
De este lado del océano Atlántico la manera de seguirlo será por televisión. Pero tampoco será sencillo. La Eurocopa sólo se podrá seguir por DirecTV Sports, canal al que acceden solo los clientes de la señal satelital, o TNT Sports, el mismo canal premium por el que se ve el torneo argentino si se contrata el Pack Fútbol.
Aunque las 24 selecciones compitan para llegar a la final de Wembley el 11 de julio, la que arranca como gran candidata es Francia. Los franceses llevan más de seis años siendo la selección más destacadas del mundo, tras ser subcampeones de la última Eurocopa y campeones del Mundial de Rusia 2018. Parece, incluso, llegar con un mejor equipo tras el regreso de Karim Benzemán, que puede armar un tridente espectacular con Kylian Mbappé y Antione Griezman. A eso hay que sumarle al centrocampista N’golo Kante, máxima figura de la última Champions League. «Podría formar un equipo A, un equipo B y un equipo C porque en este momento tienen un número increíble de jugadores top. Son los campeones del mundo. Son los últimos finalistas de la Eurocopa. No veo ninguna debilidad. Si tuviera que decir un equipo para ganar, diría Francia, porque el grupo de jugadores es fantástico. Tienen que ganarlo. Si no, es una Euro fallida», pronosticó José Mourinho en The Sun.
Un escalón detrás arrancan Bélgica e Inglaterra, que llegaron hasta las semifinales del último mundial y cuentan con grandes estrellas además de procesos consolidados gracias al trabajo de varios años de sus cuerpos técnicos. Inglaterra, además, tiene el plus de que si logra llegar a las semis jugará como local. Para los belgas, la preocupación es que no podrá contar con su máxima figura, Kevin De Bruyne, durante los primeros partidos, tras el golpe en el rostro que sufrió en la final de la Champions League.