El fanatismo del presidente Mauricio Macri por el fútbol es conocido. De hecho, usó la pelota en varias ocasiones para intentar tender puentes bilaterales con Jefes de Estado de otros países, como Alemania, Rusia, Colombia, México y Paraguay, entre otros. Por eso, no sorprende que haya invitado a almorzar a la Quinta de Olivos al flamante entrenador de la Selección, Jorge Sampaoli. Sí causa asombro que el entrenador decidió dejar clara la distancia con el presidente de la Nación, al salir de la reunión con Macri.
Finalizó el almuerzo en la Quinta de Olivos. En un encuentro que se gestó por una obligación protocolar, Jorge Sampaoli aprovechó para manifestarle al presidente, Mauricio Macri, preocupaciones sobre el estado del fútbol argentino. Sampaoli asistió al encuentro abierto a mejorar el deporte nacional. Vale aclarar que el encuentro no responde a ninguna vinculación ideológica, sino a responder a una invitación desde Presidencia, fue el mensaje que dieron a conocer desde el entorno del DT, que estuvo acompañado de Claudio Chiqui Tapia, presidente de la AFA, y Daniel Angelici, presidente de Boca, vice de la AFA y amigo de Macri. Sobre las versiones acerca de si Sampaoli se quedaría a jugar al fútbol a la Quinta de Olivos, las desmentimos, aclararon desde el entorno del técnico, ya que en Olivos aprovecharon la tarde del viernes para jugar al fútbol con los candidatos del PRO para las próximas elecciones legislativas.
En el año 2013, en una entrevista con el diario La Tercera de Chile, Sampaoli anunció que en las elecciones votaría al Frente para la Victoria. Y también se confesó kirchnerista cuando la radio Onda Cero, de España, le preguntó por su simpatía con el gobierno de Cristina Fernández de Kirchner. El seleccionador también contó que se define como peronista y que incluso en algunas ocasiones mira videos en You Tube de los discursos de Juan Domingo Perón para construir su perfil como líder y conductor de un grupo.