La diputada porteña por el Frente de Todos (FdT) y nieta restituida, Victoria Montenegro, presentó su libro Hasta ser Victoria, en el que relata su camino hacia la restitución de su identidad, en el marco de la celebración del «mes del derecho a la identidad». El evento se realizó en el Centro Cultural Kirchner (CCK) y estuvieron la presidenta de Abuelas de Plaza de Mayo, Estela de Carlotto; el periodista Claudio Villarruel y la directora de Marea Editorial, Constanza Brunet.
Montenegro relató su infancia como María Sol Tetzlaff (el nombre que recibió al ser apropiada), el proceso de recuperación y aceptación de su identidad, su actividad en Abuelas y sus inicios en la vida política.
El 13 de febrero de 1976, un grupo de tareas comandado por el coronel Herman Antonio Tetzlaff irrumpió en su casa, en la localidad bonaerense de William Morris, y la secuestró cuando tenía trece días de vida junto a sus padres. Tetzlaff se apropió de Victoria, le eligió un nuevo nombre y la educó según la ideología que sostenía al terrorismo de Estado.
Montenegro se define como «hija de Toti Montenegro y de Hilda Torres, desaparecidos por el terrorismo de Estado». Contó que «yo aparezco en el 2000. Lo que sentí era que mi sangre estaba sucia. Pensaba que mi papá (Tetzlaff) no me iba a querer más. Me daba mucha vergüenza decir que ‘era hija de la subversión'». Y añadió: «En un momento, mi apropiador me dijo que hubo un enfrentamiento, que él me había salvado la vida. Y yo le agradecí que me había criado a pesar de ser una hija de uno de sus enemigos».
«En mi caso nunca busqué mi identidad -dijo Montenegro a Télam-; hice todo lo posible para que la justicia no pudiera avanzar en encontrarme porque no creía que existieran las personas desaparecidas, para mí era un tema de persecución política hacia mi papá que era un soldado que había luchado por la patria, pero las Abuelas no claudicaron».
Carlotto señaló que «al principio Victoria no me podía ni ver, no quería saber nada. Era como un odio, sobre todo por la crianza mentirosa apropiadora de los ladrones de estos niños, pero nosotras sabíamos que había que esperar. Y hoy la vemos y es un ejemplo. Trabajando todos los días por los demás». Destacó: «Queremos y tenemos que hacer el país que querían los 30 mil desaparecidos».
Entre los presentes estuvieron además referentes de los derechos humanos como Rosa Rosinblit, Lita Boitano, Taty Almeida, Buscarita Roa, además del ministro de Cultura, Tristán Bauer; el Procurador del Tesoro, Carlos Zannini; el senador nacional Mariano Recalde, los candidatos por el Frente de Todos a diputado y legislador Leandro Santoro y Alejandro Amor; los legisladores porteños Claudio Ferreño, Javier Andrade y Matías Barroetaveña; la presidenta de la agencia Télam, Bernarda Llorente, y el secretario general de ATE Capital, Daniel Catalano.
Bauer acotó: «La presentación fue de una profunda emoción, escuchar a Victoria Montenegro rodeada de tantas Abuelas. Para nosotros la memoria, verdad y justicia es fundamental. Que Victoria haya tenido la valentía de traducir en palabras su vida, me parece una verdadera maravilla, y hacer este evento en el CCK también es muy importante».
Recalde expresó que «es importante acompañar a Vicky hoy y siempre porque es una amiga y estos testimonios que dejan por escrito la memoria de un pasado tremendo al que no queremos volver hay que tenerlos siempre presentes y difundirlos, no había posibilidad de no estar acá hoy».
«Hasta ser Victoria» fue editado por Marea Editorial y tiene prólogos de Carlotto y del secretario de Derechos Humanos de la Nación Horacio Pietragalla Corti. El encuentro terminó con una foto grupal al grito de «30 mil compañeros detenidos desaparecidos. ¡Presentes! Ahora y siempre!