El 20 de junio de 2021 moría inesperadamente de un infarto Juan Forn. Tenía 61 años. Su muerte dejó truncas las contratapas que publicaba cada viernes en el diario Página /12 y que se habían convertido en una lectura de culto.
El método Forn
En una conferencia el escritor explicó qué problemas le plantearon estas contratapas que se volvieron leyenda y lo obligaban a decir todo en apenas 100 líneas: “Cuando vos necesitas hacer una pausa en la historial principal, hacés que la historia secundaria pase a primer plano y viceversa. Son los efectos de cámara que hace el cine de poner a la señora de la segunda fila en foco y deja a la señora de la primera fila en `borroso`. Me gusta que las paralelas se toquen, que en el final, todas aquellas cosas que fui sembrando, converjan.”
Forn recurrió en sus contratapas a la información periodística y a la creación literaria y su muerte dejó para siempre sin ellas a una constelación de lectores que lo admiraban. No fue el único proyecto interrumpido. En el momento de su muerte estaba por aparecer un libro para niños que escribió en coautoría con su compañera de vida, María Domínguez y que no llegó a ver publicado. Hombre de pasiones múltiples, tuvo también pasión por el fútbol, quizá uno de sus perfiles menos conocidos.
Cada viernes, un encuentro
Yanina Safirsztein busca continuar con esa entrega que hacía para muchos que el viernes fuera el día más esperado de la semana, no solo porque era el previo al descanso, sino también, o sobre todo, porque las columnas de Forn eran una promesa de una lectura placentera que siempre ofreciía un dejo de asombro.
«Se me ocurrió durante una cena con amigos –le dice Safirsztein a Télam-. Unos días atrás había estado releyendo algunas contratapas- porque se acercaba el segundo aniversario de la muerte de Juan- y se las comenté. En ese momento me di cuenta de que una parte muy hermosa de esos textos tenía que ver con la alegría que nos producía recibirlos, semana tras semana, periódicamente. Era como recibir una carta de Juan, que nos mandaba a todos, desde la playa», Entonces, según le informó a Télam, decidió que esa carta llegara «cada viernes con un texto nuevo, tejido con una maestría sublime, siempre emotivo, y sobre el cual después podíamos conversar, compartir, seguir pensando».
“Nosotros te recordaremos”, el nombre del proyecto a través del cual todo aquél que quiera suscribirse recibirá cada viernes una contratapa del Forn a través de un newletter, es un juego de palabras nacido del título “Yo recordaré por ustedes” el trabajo en el que que Forn recopiló y seleccionó las contratapas de los viernes y que publicó poco antes de morir. «Creo que va a ser un hermoso homenaje sostenido en el tiempo –dice la impulsora del proyecto- , un modo de agradecimiento, de gambetear a la muerte por un rato, de estar en comunión con él. Va a ser una lectura -o relectura- que nos va a hacer muy felices (otra vez) a todos».
Y agrega refiriéndose a las contratapas: «Me gustan mucho todas y por suerte hay unas cuantas que todavía no leí». Entre sus favoritas se cuentan «Cómo convertir anfetaminas en teoremas», sobre el matemático húngaro Paul Erdős y «Trece maneras de decir Martha», sobre la gran Martha Argerich. «¡Y la primera contratapa que publicó, curiosamente un día lunes y no un viernes! Se llama «Antes de perder un sueño», sobre un sueño que soñó él y que vamos a recibir todos el primer viernes de julio a través del newsletter»
A partir de julio, «Nosotros te recordaremos» enviará todos los viernes una contratapa Será a través de un newsletter al que se podrán suscribir los lectores a través del link: https://tinyletter.com/Safirsztein o enviando un mail a: [email protected]
Sin duda, se trata de un hermoso proyecto, un intento de burlar a la muerte provocando la renovada emoción de un encuentro semanal con la escritura de Juan Forn, es decir con uno de los grandes periodistas y escritores argentinos y con la persona entrañable que fue.