J.K. Rowling se convirtió de Cenicienta en multimillonaria. El pasaje de un estado a otro tiene que ver con el niño mago Harry Potter que parece haberla tocado con su varita para convertirla en una escritora rica y famosa. A los 51 años y luego de siete libros destinados a chicos y preadolescentes y de dos novelas para adultos, la escritora ha aprendido a ser noticia en la prensa con declaraciones que constituyen un guiño simpático para sus seguidores.
Esta vez, declaró que tiene un cuento escrito en un vestido, precisamente el que lució al cumplir los 50 años. Por lo tanto, está colgado en su guardarropa. Se trata de un cuento de hadas y su autora dice no estar segura de publicarlo alguna vez aunque su declaración hace pensar lo contrario. «La temática de mi 50 cumpleaños el cual celebré en Hallowen, aunque ese no es mi verdadero cumpleaños, era ir como tu pesadilla privada y fui como un manuscrito perdido», dijo en una entrevista a la CNN en la que explicó que lo había escrito en el vestido.
Según parece, le gusta escribir sobre soportes poco convencionales. A falta de un cuaderno o una libreta, escribió el comienzo de Harry Potter y la piedra filosofal en una servilleta de un café de Edimburgo. Y no le ha ido nada mal, ya que ha vendido 450 millones de ejemplares de sus libros en todo el mundo.
Es posible que su revelación sea el anuncio de la publicación del cuento o de un libro que reúna varias narraciones cortas. Dado que todo lo que escribe J.K. Rowling se convierte en oro, la escritora tiene en la percha un modelito más caro que el de un gran diseñador de ropa. Seguramente sus lectores verán el vestido en alguna exposición y la prenda se convertirá en un fetiche como casi todo lo que pasa por sus manos, desde manuscritos a lapiceras.