“Attention, écoute”, invita una voz telefónica al comienzo de Souvenir, el quinto trabajo discográfico del Guillo Espel Cuarteto. Bajo el cielo sonoro vibrante, cambiante, cargado de diálogos entre los diversos instrumentos y por momentos impredecible de “En el bosque”, asoma nuevamente la voz de Silvia Hopenhayn recitando el poema Correspondances de Charles Baudelaire. “Tienen la propagación de las cosas infinitas / como el ámbar, el almizcle, el benjuí y los inciensos / que cantan los viajes del espíritu y los sentidos” finaliza el poema, que se confunde con el cristalino timbre del vibráfono ejecutado con arco, que enlaza este primer tema con la atmósfera hipnótica de “Hiedra al sol” de Luis Alberto Spinetta, interpretada por la también cristalina voz de Agus Voltta.
La agrupación está integrada por Oscar Albrieu Roca: vibráfono, marimba, batería, crótalos, gran cassa, gongs, tam-tam, campanas y accesorios de percusión (metales y parches), Damián Foretic: bandoneón, Pedro Carabajal: cello y Guillo Espel: composición, guitarra, guitarra eléctrica, bajo eléctrico, piano, y dirección musical, a los que se suman Coti Moroni: clarinete y clarinete bajo e Ignacio Svachka: xilófono, glockenspiel y vibráfono, transformando al cuarteto en un sexteto en varias pistas del álbum.
También participan del disco Nicolás Guerschberg (piano); Marcelo Predacino (guitarra); Alejandro Guerschberg (bandoneón) y un quinteto de cuerdas conformado por Elías Gurevich (violín I); Humberto Ridolfi (violín II); Elízabeth Ridolfi (viola); Pedro Carabajal (cello) y Horacio «Mono» Hurtado (contrabajo) como músicos invitados.
Esta nueva placa, sucesora de Guillo Espel Cuarteto (2004), Salir al ruedo (2008), A otro lugar (2011) y Teatro Colón (CD + DVD) (2016), es una colección de diez canciones en la que el material sonoro está afincado en los aires folklóricos regionales que Espel suele frecuentar.
Esta característica se evidencia en “Siempre un nuevo atardecer”, con el bandoneón deslizándose delicadamente sobre su melancólica melodía. “Impersonation II” cede el protagonismo al ostinato que marca el pulso a cargo del vibráfono, mientras que la melodía queda a cargo del flugelhorn de Fernando Ciancio.
“Piedras sagradas” (con letra de Eduardo Guerschberg), una sensible zamba con Germán Gómez a cargo del canto, va creciendo con sutileza en intensidad, hasta esfumarse, mientras que las cuerdas mecen la apacible melodía de “Cada día de Julia”, a cargo de la guitarra.
Santiago Espel es el responsable del texto de “La viga del cielo”, interpretado por Guadalupe Farías Gómez, una pieza en la que otra vez las cuerdas tienen un gran protagonismo que luego es cedido al solo de guitarra acústica a cargo de Espel.
“Impersonation II” ofrece un espíritu casi jazzístico en el que el clarinete de Moroni se hace cargo del desarrollo melódico, mientras que “Siluetas blancas” funciona casi como una pequeña obra de cámara, gracias a la inteligente interacción de las cuerdas, los vientos y los instrumentos del cuarteto.
El cierre del disco está a cargo de Espel con su guitarra en una sentida versión de “Tarde de invierno”, composición del inolvidable Manolo Juárez, a modo de tributo hacia uno de los grandes renovadores del folklore de nuestro país.
Las diez obras que integran Souvenir muestran el refinamiento con el que Espel y el cuarteto, que se amplía a sexteto en algunos temas, tejen las diversas texturas melódicas y armónicas con un cuidadoso trabajo en los arreglos y en el desarrollo de los aspectos tímbricos, lo que denota una profunda exploración de los recursos de cada instrumento.
Espel trajaba en sus composiciones hasta convertir cada pista del álbum en una pequeña obra de orfebrería sonora. Excusa suficiente para hacer caso a la recomendación del principio del álbum: “Attention, écoute”. Un disco para escuchar con atención y dejarse sorprender a cada compás.
Guillo Espel Cuarteto
Jueves 15 de setiembre a las 19.
Centro Cultural Borges, Auditorio Astor Piazzolla
Viamonte 525, CABA. Entrada Libre