Luego de diez años de insistencia, la supuesta hija no reconocida de Salvador Dalí logró que se exhumara el cadáver del artista para ser sometido a una prueba de ADN. La fundación que lleva su nombre, que considera tal exhumación un acto de violencia, amenazó con iniciarle un juicio a la demandante, Pilar Abel Martínez, si las pruebas no le dan la razón. «La resolución judicial que acordó la exhumación no está motivada y ni tiene ningún fundamento», dijo el gerente de la Fundación Gala Salvador Dalí, Joan Manuel Sevillano, en conferencia de prensa apenas unas horas después de que los restos del artista fueran desenterrados y vueltos a sepultar. «No hay ningún indicio de que la pretensión de la demandante agregó- tenga algún fundamento, ya que lo único que ha aportado es una manifestación notarial de una señora que dice ser amiga de la madre, afirmando que ésta le dijo que el padre de su hija era Salvador Dalí».
Albert Segura, abogado de la Fundación apuntó que al tratarse de «un acto tan agresivo contra la memoria de un difunto sin que haya indicios suficientes», reclamarán «un error judicial para ver si hay posibilidad de obtener una compensación patrimonial por parte del Ministerio de Justicia».
La apertura de la ataúd se produjo a las 22.20 horas y cerró a las 23.40 (5 horas menos en Argentina), debido a la dificultad que supuso la extracción de la capa de zinc que cubre el féretro. La losa fue levantada con dos vigas y poleas. Así se accedió al interior de la tumba. El ataúd estaba en perfectas condiciones. Se levantó a superficie sin incidentes y se movió a la zona de forenses, indicó.
Los expertos forenses sacaron «uñas, pelos, varios dientes y dos huesos del pintor», que después de realizarse el test de comparación con el ADN de Pilar Abel, se exige que se devuelvan para preservar la «integridad» del cadáver de Dalí, de modo que la tumba se abrirá por segunda vez. Según se informó, el bigote de Dalí preservaba su clásica postura de las diez y diez, en la posición de las agujas del reloj». Todo el proceso de exhumación llevado a cabo en el interior del Teatro-Museo de Figueras duró en total cuatro horas, algo menos de lo previsto, y estuvieron presentes las personas que asistieron al entierro de Dalí en 1989, entre ellos su embalsamador, Narcís Bardalet.
El abogado de Pilar Abel, Enrique Blanquez, quien también estuvo presente en la exhumación, admitió que las muestras extraídas pueden no ser válidas pero confía en que sí lo sean. «Los forenses toman las muestras pero no llegan a valorar si es suficiente. Me dijeron que hoy en día los laboratorios hacen maravillas, pero no se puede garantizar»,- Los resultados del test de paternidad estarán listos para principios de septiembre, antes de la fecha fijada para el juicio de paternidad, el 18 de ese mismo mes. Pilar Abel insiste en que lo único que pretende con su demanda es saber la verdad y demostrar su filiación con Dalí, pero de confirmarse que es hija del pintor podría reclamar el 25% de su herencia, indicó el abogado de la fundación.