“Esta exposición –le cuenta a Tiempo Argentino Joaquín Barrera- uno de los curadores de la muestra- nace hace un año y medio a partir de tres curadores que son también amigos. Los tres comenzamos a preguntarnos por qué siendo el fútbol un deporte tan popular para nosotros, no teníamos a ciencia cierta un registro de obras que giraran en torno a él. No es común en la producción artística de Buenos Aires ni del resto del país que aparezca el fútbol. Empezamos a ver qué pasaba, cuáles eran sus causas, por qué en un país marcado por el fútbol como el nuestro no encontrábamos en las artes visuales mucho registro. Entonces, solamente por gusto, para unir nuestras dos pasiones, el arte y el fútbol, comenzamos a reunirnos los sábados fuera de nuestros horarios laborales para pensar dónde había imágenes de fútbol en el arte, cómo y por qué aparecían. Cada uno fue aportando, fue investigando, tratando de ver qué había pasado y por qué.”
El producto de este trabajo es la muestra Figuritas. Apariciones futboleras en el arte argentino que pude verse en la Casa Nacional del Bicentenario hasta el 26 de febrero del año próximo y que reúne piezas de distinto tipo, desde esculturas a instalaciones y videos.
Participan de ella más de 40 artistas: Adriana Martinez, Alejandro Kuropatwa, Alfredo Dufour, Amalia Amoedo, Benito Laren, Boleslaw Senderowicz, Carlos Herrera, Constanza Castagnet, Constanza Chiappini, Daniel Basso, Deborah Pruden, Diego Figueroa, Emiliano Guerresi, Emilio Bianchic, Fátima Pecci Carou, Guillermo Iuso, Guillermo Roux, Gustavo Piñero, Hernán Kacew, Hernán Sansone, Julián Medina, Julio Vanzo, Laura Códega, Laura Ojeda Bär, Leonel Fernández Pinola, Luis Centurión, Malcon D’Stefano, Marcia Schvartz, Marcos López, Mariana Lopez, Mariana Tellería, Mario Scorzelli, Marta Minujín, Martín Kazanietz, Mimí Laquidara, Nicola Costantino, Patricio Larrambebere, Robert Davies, Rosana Fuertes, Sandro Pereira, Sebastián Gordín, Sergio Avello, Trinidad Metz Brea, Virginia Buitrón.
Paradójicamente, según afirma Barrera, no existe una correspondencia entre la pasión argentina por el fútbol y la cantidad de producción artística que lo tiene como eje central. La muestra nace, precisamente, a partir de la pregunta por las razones de la asimetría entre la pasión futbolera y su representación en el arte argentino. “Comprobamos -dice- que el fútbol aparece en la obra artística muy subsidiariamente, que no es un tema central. Son muy pocos los artistas cuyo tema es el fútbol. Son excepción Martín Cazanietz, que trabaja con fútbol y básquet y Julio Vanzo que es un artista icónico de la producción rosarina y que falleció hace muchos años. Conseguimos que el Museo Castagnino de Rosario nos prestara una pieza central de su producción que se llama Fútbol, del año 54, que está exhibida en la muestra. En el resto de los artistas el fútbol era la excusa para hablar de otros temas. Como Aby Warburg, siguiendo el estilo de su Atlas, comenzamos a juntar “figuritas” tratando de encontrar hilos conductores que le dieran una unidad a esas imágenes que veíamos. Fuimos haciendo una selección y en algún momento tuvimos que poner un punto.”
A partir del material recolectado, comenzaron a verse los distintos ejes o núcleos alrededor de los cuales giraba. “En el primero –continúa Barrera- aparecía el fútbol ligado a lo cotidiano, al rol social de este deporte, a cómo afecta a la comunidad. Luego, a partir del registro de Julio Vanzo y de Hernán Kacew se pudo establecer otro núcleo que tiene que ver con las corporalidades, con como el fútbol también puede ser una danza y de qué modo atraviesa distintos tipos de cuerpos, no solo los que responden a su estética y todas las disidencias que aparecen alrededor de esto. Un tercer núcleo tiene que ver con la profesionalización que va ligada a la aparición de la vida privada de los futbolistas como celebrities, que va más allá del fútbol en sí mismo y tiene que ver con la farándula. Nos interesó cómo los colores son símbolos de diversas cosas, el papel de lo cromático tanto en el fútbol como en el arte, También hay un núcleo fantasma que es la presencia o la ausencia de Maradona, una de las imágenes más repetidas de la fotografía contemporánea, no tanto la artística, sino el registro de los reporteros gráficos. Quisimos darle lugar a una frase, un pensamiento que expresó Valdano: `Maradona es el ausente más presente del mundo`. Este es un núcleo espectral, el duelo. Decidimos poner una parte negra, darle un descanso a la figura de Maradona. Allí hay dos obras. Una es una fotografía que se ve sobre una pantalla del famoso gol con la mano. En ella no se le ve el rostro, es una abstracción que hizo Robert Davis. A pesar de no ver la cara de Maradona, inmediatamente se reconoce su imagen. La otra obra es un video de 2020 de la artista rosarina Mariana Tellería. Se trata del gol a los ingleses en el Mundial de México de 1986. Ella borró la imagen de los jugadores y dejó solo la pelota sin el cuerpo de Maradona como una presencia espectral. Se escucha el mítico relato de Víctor Hugo Morales en el que se refiere a Maradona como “barrilete cósmico.” La obra se llama Él, boceto para una obra inconclusa” y permanecerá inconclusa para siempre debido a la muerte de Maradona.”
En la muestra aparecen algunos nombres de artistas que, por las características de su trabajo, no se los relaciona con la pasión futbolera. Uno de ellos es el del gran artista Guillermo Roux. “Su trabajo -informa Barrera- se llama Futbolistas y es una acuarela con diversos cuerpos alrededor de una pelota que generan una mancha amorfa y se ubica dentro del núcleo de corporalidades.” Y agrega: También hay una obra de Marta Minujin, una pintura del año 77 que se llama Mi Mundial.
La razón última de la asimetría entre fútbol y expresión artística no es fácil de dilucidar. Quizá una de las posibles respuestas se encuentre en la “apropiación” que el periodismo ha hecho de ese deporte. “Eso no lo sabemos –explica Barrera-, pero sí comprobamos a través de nuestro trabajo que aparece de manera subsidiaria en el arte. En principio la muestra estará expuesta hasta el 26 de febrero, pero nos gustaría que se prolongara para que pudiera verla más gente. Creo que lo más político que tiene debido a su temática popular es la posibilidad de que se acerquen otros públicos que no son los habituales en una muestra de arte.”
El texto curatorial de la muestra es una excelente síntesis de su espíritu: “Figuritas no es una romantización ingenua del fútbol ni una búsqueda por utilizarlo como una herramienta para denunciar sus intereses comerciales. Por el contrario, es una propuesta desde las contradicciones de un deporte en cuyo centro luchan los sentimientos populares, los capitales económicos y las identificaciones culturales. En esa complejidad se detiene esta exhibición, asumiendo los distintos matices que acompañaron al fútbol y al arte desde hace más de treinta años y que continúan en la actualidad.”
La muestra Figuritas. Apariciones futboleras en el are argentino puede visitarse hasta el 26 de febrero, en la Casa Nacional del Bicentenario, Riobamba 985, CABA, de miércoles a domingos y feriados de 15 a 20.