La 14ª edición del Festival Internacional de Literatura de Buenos Aires viene cargada de promesas. Habrá lecturas, recorridos literarios, recitales de poesía, música, biblioteca abierta y entrevistas.
Además, participarán invitados de lujo a nivel nacional e internacional. La apertura estará a cargo nada menos que de la escritora María Negroni y Laurie Anderson hará una lectura en el Centro Cultural Recoleta. “Las actividades son todas gratuitas, excepto la de los talleres que tienen colmado el cupo de inscripción –sintetiza Amalia Sanz, directora del Filba-. El jueves estará Diana Bellesi en una entrevista a fondo; el viernes Leila Guerriero y el domingo, Beatriz Sarlo. También habrá una noche de poesía en la terraza de Eterna Cadencia, un lugar hermoso donde los participantes pueden escuchar poesía mientras se toman un trago. El sábado por la noche será el momento de “La francachela”, una fiesta que se viene haciendo desde hace tiempo en la librería de Villa Crespo Aristipo. Se corta la calle y se invita a leer, comer choripán, tomar vino y bailar.”
“Esta nueva edición -cuenta – tiene las huellas de la presencialidad que hace que este encuentro vuelva a ser nuevo. En esta oportunidad tenemos solo cuatro filiales virtuales que las mantenemos porque no queremos perder del todo el alcance que puede dar la virtualidad respecto de los públicos y los escritores y escritoras, pero estamos apostando muy fuerte al reencuentro. El año pasado tuvimos apenas un `coqueteo´ con la virtualidad, pero esta vez estamos a full todos los días, con más de 70 actividades presenciales.”
Y agrega: “Este año el eje gira en torno a una temática que ha estado muy presente en estos últimos tiempos y que tiene que ver con los activismos. Nos gusta trabajar cierta literatura vinculada a la naturaleza, lo que nos fue llevando al activismo verde, al activismo ecológico. Nos referimos a la naturaleza no como paisaje de fondo, sino como una fuerza con papel protagónico, como un contexto que impone nuevas formas de pensar y nuevas preguntas. Justamente, la novela ganadora del premio Fundación Medifé Filba 2021fue Los llanos, de Federico Falco, que está relacionada con eso.”
“Justamente, mañana a las 19, -continúa- va a realizar una performance un colectivo que se llama Ruge el Bosque y que hace un llamado a poetas de toda Latinoamérica. También nos fuimos encontrando con algunos textos que hablaban de colonialismo desde la literatura y eso nos fue abriendo otras puertas a distintos tipos de militancia relacionadas con la literatura. Desde hace tiempo venimos trabajando en lo que llamamos Fuerza Activa un concepto referido a la potencia de cambio que puede tener la literatura.”
En un momento en que parece haber un desaliento generalizado respecto del futuro y una cierta desconfianza tanto de la política como de distintas áreas de la cultura, Sanz, se muestra optimista respecto de las posibilidades de cambio y el poder transformador de la literatura. No por casualidad, esta edición del Filba gira en torno a la idea de “Fuerza Activa”. “Estoy de acuerdo en que atravesamos un momento difícil y de cierto escepticismo –dice-, pero ese escepticismo no es con la política, sino con los políticos y creo que la diferencia no es menor. Me parece que sí hay esperanzas y posibilidades de cambio, sobre todo en los movimientos sociales, incluso en aquellos que no nos gustan tanto. Las mujeres estamos más activas que nunca y hay muchos colectivos pensando en cómo modificar las cosas. Dentro de la literatura también veo fuerzas activas. Del Ni una menos participaron o se pusieron al frente muchas intelectuales, escritoras, poetas. Ahí hubo un poder transformador que tuvo efectos muy claros en la realidad bastante inmediatos, aunque todavía hay muchísimo por trabajar y por recorrer”.
Y añade: “Las escritoras fueron protagonistas y, a su vez, estos cambios se vieron reflejados en la producción tanto de escritoras como escritores. Que la literatura, sobre todo la ficción, ponga en primer plano problemas que parecen no estar muy presentes en la sociedad, tiene un efecto transformador, sobre todo en la formulación de nuevas preguntas, en la desarticulación de certezas y de ciertas naturalizaciones. En este sentido, puede hacer tambalear muchas cosas que se dan por verdades. La literatura incide en todo eso, aunque la respuesta pueda no ser inmediata. Hay libros que despiertan conciencia aunque no sea ese su rol ni se hayan escrito para eso, pero que producen ese despertar como un efecto de lectura. Además, hay muchas mujeres publicando en este momento. No conté cuántas mujeres y cuántos hombres participan del Filba, pero creo que es posible que en este momento estén publicando más mujeres que hombres.”
En cuanto al a presencia de figuras internacionales, aclara que hace tres años que vienen trabajando para traer al Filba a Laurie Anderson y que por fin en esta edición se pudo concretar el deseo. “Solo va a estar en Buenos Aires tres días. Participa del Filba y se va.”
“Hay figuras internacionales que nos importaba mucho que vinieran –informa-. Hay algunas que recién se están traduciendo en la Argentina como McKenzie Wark, que acaba de publicar en Caja Negra su primera novela traducida. Es una escritora australiana trans que hizo toda su carrera en Estados Unidos y que fue antes un académico especializado en poéticas de género, en cruces de las distintas estéticas contemporáneas y las teorías queer. Transicionó hace muy poco, hace unos dos años, y escribió su primer texto de ficción que se llama Vaquera invertida. En ella cuenta precisamente el proceso de su transición. Hay mucha expectativa respecto de ella. De Chile viene Nona Fernández que tiene ya un largo recorrido en su país y también en la Argentina. Contaremos con la presencia también de Julia Armfield, una autora inglesa muy joven que publicó un libro de cuentos, El gran despertar por editorial Sigillo. Es un libro de cuentos de terror muy inquietantes. Acaba de publicar, además, la novela Nuestras esposas bajo el mar. A los 32 años ya ha sido muy traducida y premiada y tiene aquí muchos lectores. Vendrán dos autoras mexicanas también muy jóvenes, Clyo Mendoza y Jazmina Barrera. A ellas se suma Giovanna Rivero, de Bolivia y Diego Formía de Chile. De España viene Laura Fernández, la autora de La señora Potter no es precisamente Santa Claus que fue un fenómeno de ventas en Europa.”
El Filba ofrecerá cinco días de contacto directo con escritores y escritoras, cinco días de literatura a pleno
La programación de la 14ª edición Filba se puede consultar en su página oficial del mismo modo que la lista completa de participantes nacionales e invitados internacionales.