Tragicomedia

Por: Cecilia González

Por segunda vez, Patricia Bullrich es ministra de Seguridad. No debió serlo antes. No debió serlo ahora. Pero, avatares del oportunismo, repite cargo para jugar a lo que más le gusta: consolidarse como una Pepita La Pistolera de la política

Denunciadora serial sin pruebas. Discriminadora y xenófoba. Promotora de la estigmatización contra extranjeros. Obsesionada con el terrorismo y la falsa «guerra» contra el narcotráfico. Ferviente devota de la embajada de Estados Unidos. Fan del gatillo fácil. Saltimbanqui ideológica, donde hay una oportunidad de ejercer poder, ahí se arrima. La coherencia y la lealtad le son ajenas. La ignorancia, el ridículo y la irresponsabilidad forman el combo de su marca registrada. Reprimir es su placer. Le cuesta usar el lenguaje. Todavía hoy no sabemos de qué se trataba su filosofía muy interesante, ni qué le pasaba a la gente que veía una vaca y no lloraba, ni por qué todo debía ser considerado droga, aunque no fuera una droga.

Por segunda vez, Patricia Bullrich es ministra de Seguridad. No debió serlo antes. No debió serlo ahora. Pero, avatares del oportunismo, repite cargo para jugar a lo que más le gusta: consolidarse como una Pepita La Pistolera de la política. Le sale bastante bien.

Foto: Tomás Cuesta / AFP

No importa que los policías a su mando gaseen a jubilados, mujeres, niños. Que ayude a legisladores oficialistas a visitar a represores condenados por delitos de lesa humanidad. Que mienta con descaro. Ahí sigue en su puesto, al amparo del presidente y de una protección mediática que, a veces, ilusoriamente, parece que se resquebraja.

Pasó hace poco, cuando fracasó la enésima manipulación informativa del Ministerio de Seguridad que quiso culpar a una manifestante de haber gaseado a una niña. Gracias a otros videos, todos pudimos ver, una vez más, el salvajismo de los policías que es incentivado y avalado por su jefa. Hasta algunos periodistas oficialistas criticaron a Bullrich. Pero fue solo un amago. No pasó a mayores. Sigue al mando, sin consecuencias, sin costos políticos ni penales.

Promotora de frases tan grandilocuentes como vacías, Bullrich es el ejemplo vivo de que es mentira eso de que el que las hace, las paga. Ella no ha pagado nada en tantos años de cinismo, abusos y absurdos.

Ya acusó de terroristas a un profesor sirio de ping pong, a un peluquero y a un falso espía. A dos artistas chilenos cuyo único «crimen» fue dejar una maleta en un hotel. A dos hermanos argentinos de ascendencia musulmana. Después de sus anuncios rimbombantes, todas las causas judiciales se cayeron porque no había pruebas. Se trataba de personas inocentes, víctimas de la incompetencia de la funcionaria.

Lo mismo pasó cuando exigió la expulsión de un ciudadano turco, dos venezolanos y uno paraguayo que fueron detenidos durante una de sus tantas represiones. Se les acusó de provocar disturbios en una marcha. Bullrich exigió su expulsión inmediata. Al final, se comprobó que estos ciudadanos ni siquiera habían participado en la manifestación.

En su primera gestión, la ministra aseguró que Holanda era un «narcoestado» (se tuvo que disculpar con el país de la argentina Reina Máxima). En su segunda gestión, dijo que había agentes terroristas iraníes en Bolivia y en Chile (se tuvo que disculpar con el gobierno de Gabriel Boric, al de Luis Arce decidió ignorarlo).

Ya justificó que policías mataran por la espalda a Rafael Nahuel (22 años), a Facundo Ferreira (12) o a cualquiera que sea considerado «sospechoso». Bien sabemos que esa categoría la establece el color de piel, la vestimenta, la clase social. Y cómo olvidar las infamias alrededor de la desaparición y muerte de Santiago Maldonado.

Ya anunció que iría «con buzos, con equipos radiológicos» para ver si Loan, el nene desaparecido en Corrientes, estaba en la panza de yaguaretés, pumas o víboras. Ya culpó a «veganos extremistas y anarquistas» de haber enviado una «carta-bomba» a La Rural. El único detenido, luego liberado, derrumbó su tesis: tenía una milanesa y un pollo congelado en la heladera.

Ya «amenazó» con visitar personalmente el Banco Central para saber cuántas reservas dejaría el último gobierno peronista. Un papelón más.

Ya denunció que en el sur del país hay mapuches terroristas, anarquistas y separatistas financiados por ingleses, las FARC, la guerrilla kurda, Irán y ETA, entrenados en Cuba y Venezuela para invadir y separar la Patagonia.

Ya hizo turismo en las cárceles de El Salvador y reconoció que quiere imitar el modelo violador de derechos humanos ejercido por un gobierno autoritario, de esos que tanto le gustan. Ya dijo que quiere que los niños de 13 años sean juzgados y condenados igual de los adultos.

Ya fue montonera, peronista, aliancista, macrista y mileísta.

Ejemplos de su inoperancia, sobran. Y sin embargo, ahí sigue, intocable. La impunidad que cobija a esa tragicomedia permanente llamada Patricia Bullrich debería terminar algún día. «

Ver comentarios

Compartir

Entradas recientes

Taiana: «El Gobierno insiste en hacer todo lo contrario al interés nacional»

El ex ministro de Defensa participó de un foro internacional en Tierra del Fuego. Los…

11 horas hace

ATE realizará un paro de 24 horas en la Ciudad de Buenos Aires el próximo 27 de febrero

Es en respuesta a la brutal represión que sufrieron el jueves ante la cartera que…

11 horas hace

El Comité Nacional para la Prevención de la Tortura expresó el rechazo a las reformas penales regresivas del Gobierno

Desde organismo advirtieron que, si se aprueban los proyectos que debate el Senado, aumentará el…

11 horas hace

Nuevo exabrupto y datos erróneos: el discurso de Milei en el BID

El presidente argentino se exaltó porque le sonó el celular, durante su exposición en Washington.

12 horas hace

Tras el rechazo a la comisión investigadora, el radical Rombolá dijo que está “harto de sentir vergüenza de la UCR”

El joven dirigente radical, Agustín Rombolá, dijo que pedirá la expulsión de los senadores que…

13 horas hace

La Legislatura porteña suspendió las PASO y las elecciones serán el 18 de mayo

El jefe de Gobierno porteño celebró la decisión de la Cámara, a través de redes…

14 horas hace

Dolor por el suicidio de un ex combatiente: “Cuando se toman decisiones que afectan a la salud, estas son las consecuencias”

El caso causó alarma “ya que en los últimos años no se registraban suicidios” entre…

14 horas hace

El desafío de vender productos agroecológicos ante la caída del consumo y el aumento de los costos

Alimentos sanos que venden puerta a puerta y por internet. Para resolver la logística crearon…

15 horas hace

El fiscal Taiano pidió medidas de prueba en la investigación por la criptoestafa de Javier Milei  

El fiscal federal Eduardo Taiano impulsó la investigación sobre las responsabilidades del presidente Javier Milei…

15 horas hace

Confirmado: aunque sea en pequeñas dosis, los agroquímicos alteran el comportamiento de los insectos

Un estudio muestra que insecticidas, herbicidas y fungicidas intervienen en el comportamiento y la fisiología…

15 horas hace

Entidades rurales cruzaron al presidente por el criptoescándalo: “Más producción y menos timba”

Exigen al gobierno que deje la “timba financiera”, que no “utilice al sector” y que…

16 horas hace

Cómo golpean a los productores las pérdidas económicas y ambientales de los incendios forestales en la Patagonia

Las llamas provocaron pérdidas que tardarán años en repararse. El temor de un éxodo rural…

16 horas hace