El equipo de Gallardo gana por un lado, gusta por otro y golea por un tercero: 4-1 a Banfield. Mirá los goles.
Le gana por 4-1 a Banfield en su primera presentación del campeonato pero la construcción de lo que sucede en la cancha no es lineal. Durante gran parte del partido, la pelota baila de un botín riverplatense a otro casi sin interrupción, desde el fondo de la cancha hasta casi la línea de meta rival, por el centro y, sobre todo, por los costados. Por eso river tiene la pelota el 72% del partido y por eso los dirigidos por Gallardo triplican en pases a los que siguen las órdenes de Julio Falcioni (636 a 197). En eso radica el por qué River gusta, pero las otras dos G del leitmotiv que se suele exigir en Núñez tienen otra explicación.
Todo lo bueno que hace River en estos primeros cinco partidos de la temporada sale de los pies de este nuevo mediocampo, con Nacho Fernández como eje, con Ponzio como líder de la presión, con DAlessandro y el Pity Martínez como armadores tirados a los costados y con Alario y Driussi como pistones para salir del área y sumarse al circuito de juego. Y tambien fueron importantes los laterales, que se suman siempre al ataque y lastiman. Todo lo malo, o al menos lo que le falta para brillar, es consecuencia de la falta de claridad para terminar de plasmar ese dominio de la pelota y del territorio en situaciones claras de gol. No es casual que sólo uno de cada cuatro pases sean para adelante. Por eso si River gana, esta vez ante Banfield, es porque como ante Independiente Santa Fe sus delanteros son efectivos. Driussi y Alario vuelven a marcar adentro del área y en ambas anotaciones hay cuatro jugadores más del rival en los metros finales y la claridad para mandarla a guardar le gana al amontonamiento.
Cómo hace River para golear es otro capítulo aparte. La tercera G se concreta en el peor momento del equipo de Gallardo, en el que pierde el dominio de la pelota y en el que Banfield logra salir del acedio para intentar, sin mucho, ir por el empate, como en la primera mitad con el cabezazo de Santiago Silva. El 3-1 y el 4-1 llegan en jugadas más bien aisladas, más de generación espontánea que de una construcción y en las que la complicidad de Hilario Navarro es importante para que DAlessandro y el Pity festejen cada uno con un banderín del córner distinto.
Este River que comienza la temporada con dos triunfos en la Copa Argentina, con la obtención de la Recopa Sudamericana y con esta goleada ante Banfield parece tener argumentos para asentarse como un equipo protagonista del fútbol argentino e incluso para trascender. Parece tener el juego, parece tener los goles y hasta parece tener suerte, aunque por ahora no en sintonía. Si logra conjugar todo eso, estará más cerca de su objetivo en cada partido: ganar, gustar y golear.
Los goles del partido:
En un procedimiento inédito en América Latina, por primera vez se trasplantó un hígado proveniente…
“Un peronista pasó a libertario; así consiguen votos para las leyes”, dijo la ex presidenta…
Un trabajo conjunto de tres centros de investigación bonaerenses, confirmó la aparición y expansión de…
El gobernador bonaerense arremtió contra el presidente Javier Milei por el cambio en los medicamentos…
En el 15º aniversario del legendario concierto en el estadio de Vélez, por primera vez…
Como parte de los eventos por el Día Internacional de la No Violencia contra las…
Sin ningún miedo al ridículo, el presidente ensayó unos pasos de baile. Cómo sigue la…
La agrupación que acompañó a Willy Crook en sus años dorados vuelve a presentarse para…
Además, la expresidenta volvió a cuestionar al Poder Judicial por no someterse a la voluntad…
Fue uno de los senadores que llegaron al Congreso con el voto peronista, para luego…
Adoptó una resolución convocando una conferencia de alto nivel para solucionar el conflicto de manera…
El piloto argentino continuaría en Williams, en un rol estratégico.