La primera semana de julio se viene con novedades para todos los gustos. Terror psicológico, abogados egocéntricos, superhéroes animados y más. ¿Cuál será tu próxima ficción favorita?
Dolores Roach tuvo que pasar 16 años en prisión porque el juez dijo que tenía “posesión con intención”. En un mundo cada vez más gobernado por los poderes judiciales, el caso de Roach aparece como botón de muestra del estado desesperante al que someten a gente que no tiene dinero. A la salida de la cárcel vuelve a su Washington Heights, donde un viejo amigo le abre un espacio en su local de comidas para que dé masajes: allí sus manos hacen maravillas. Pero en esa precariedad legal y laboral, la propensión al abuso de la trabajadora crece, y Dolores se enfrenta a una nueva situación que puede devolverla a la cárcel: en defensa propia, mata a un cliente. Ahí puede decirse que empieza la serie o al menos adquiere su velocidad narrativa.
Producida para Cartoon Network, basada en personajes de DC -con Jack Quaid prestando su voz al héroe titular y Alice Lee como Lois-, esta serie animada presenta a Clark Kent, Lois Lane y su mejor amigo Jimmy Olsen en sus veinte. Que es el momento en el que comienzan a descubrir quiénes son y todo el poder que tienen. Así la historieta de DC vuelve a la animación y arriesga con ensayar una historia más colectiva que individual. En estos tiempos de tantas narraciones sobre los ricos que sufren habrá que ver cuáles son los problemas de Superman de joven.
Así se lo conoce a este inefable letrado porque anda en un Lincoln que lo obsesiona tanto como sus casos. Que lo obsesionan mucho porque así consigue la fama y el dinero que necesita para alimentar su ego, que por lo visto en la primera temporada es grande, enorme. Como ya aprendimos de otras muchas series con personajes todopoderosos, en la satisfacción de su vanidad está la trampa que los pone en aprietos. Bueno, de esto va la segunda temporada con un caso de asesinato de muy difícil resolución, luego de que en la primera Mickey Haller (Manuel Garcia-Rulfo) mostrara todas sus habilidades leguleyas y de seducción.
Llega la segunda entrega de lo que será una despedida en cuatro temporadas de una de las series de animé más exitosas (y con buenas críticas) de todos los tiempos. Fue parte de lo que se conoció como Big Three (junto con Naruto y One Piece) y que marcó a la generación de principios de siglo se sumó al manga japonés. Bleach había finalizado en 2013, no muy bien según sus fans: se completó el gran arco narrativo de Aizen como villano, mientras Ichigo Ichigo Kurosaki y los segadores de almas se alejaban sin pena ni gloria. Volvieron el año pasado a Disney luego de 9 años y los fans -y los no tanto- están al borde del delirio con el regreso de Ichigo al reino de Hollows y Soul Reapers al aparecer una amenaza desconocida. Cualquier serie del animé japonés se puede seguir si se la toma desde el principio: en sus infinitas recovecos e ideas y vueltas está su magia para cautivar. Animesé.
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