Otro clavo en el ataúd de la paz posible

Por: Rafael Araya Masry

Cuando el ex primer ministro israelí Yitzhak Rabin fue asesinado por un terrorista judío el 4/11/95 en venganza por la firma en septiembre de 1993 de los Acuerdos de Oslo con Yasser Arafat, en presencia de Bill Clinton, Israel comenzaba una frenética carrera por capturar tierras palestinas en la Ribera Occidental (Cisjordania), promoviendo y financiando la implantación de nuevas colonias judías, con la finalidad de cortar la continuidad territorial palestina y aplicar la tesis de que no son tierras de los habitantes originarios árabes,  sino territorios en disputa.

Más allá de las críticas de la comunidad internacional al avance israelí sobre tierras del otro lado de la denominada Línea Verde –toda la Ribera Occidental y la parte oriental de Jerusalén, donde viven millones de palestinos– ni la ONU, ni ninguna potencia central dictó medidas coercitivas de represalia para condenar la anexión que Israel llevaba adelante, expandiendo de forma permanente sus propios límites territoriales. Recordemos: esa comunidad internacional, personificada en la ONU, creó un Estado de Israel independiente y soberano, y para el pueblo palestino creó una oficina de refugiados.

La evolución de la propia sociedad israelí, a partir de la ocupación militar de la totalidad del territorio de la Palestina histórica, está signada por un progresivo proceso de alienación ante el drama que vive el pueblo palestino de modo cotidiano. Ahí radica el éxito de la ideología imperante. El proceso de “normalización” de la ocupación se afronta en general con apatía e indiferencia y se vive casi como algo natural, negando, por ende, la categoría de iguales a un pueblo que exhibió los títulos necesarios –desde la legalidad y la legitimidad– para ejercer su derecho a la libre autodeterminación, en apego al Derecho Internacional y a la Declaración Universal de los DD HH. Es la no-concesión de la otredad. Tan es así, que la Ribera Occidental en el lenguaje israelí es denominada como Judea y Samaria, otorgando al proyecto colonial sionista la dimensión de un mandato divino donde Dios ejerce como agente inmobiliario y la Biblia como un título de propiedad.

Si a esta opresión le agregamos la entrada en escena de Trump, tenemos la tormenta perfecta. Porque a partir de su reconocimiento de Jerusalén como capital israelí, atropellando la ley internacional, comienza a desatarse una cadena de hechos que tienen su desembocadura en el mal llamado Acuerdo del Siglo, pergeñado por el yerno presidencial de EE UU y del que Palestina ni siquiera ha sido partícipe, y en el consiguiente proceso de anexión en ciernes.

El mundo debe frenar esta locura. Si ellos crearon el problema de origen, deben aportar las soluciones. Es hora de que actúen. Palestina merece vivir como cualquier país normal.


Compartir

Entradas recientes

Maduro acusó al gendarme Gallo de querer asesinar a su vice Delcy Rodríguez

En un mensaje televisivo, también apuntó al gobierno argentino: “Está involucrado en los planes violentos…

7 horas hace

Congreso: preparan proyecto para extender el Fondo Nacional del Turismo por ley y derogar el DNU de Milei

El DNU extiende hasta el 31 de diciembre de 2027 la vigencia de un gravamen…

9 horas hace

Alejandra Macri reclama su parte en casi 400 empresas vinculadas al patrimonio familiar

Una hermana de Mauricio Macri presentó una demanda judicial para exigir su legítima herencia, señalando…

13 horas hace

El Gobierno de CABA sacó de circulación los contenidos de ESI para una “revisión exhaustiva” y un “estudio neutral”

“Los contenidos de la ESI que estaban disponibles en páginas oficiales del Gobierno quedan inaccesibles”,…

14 horas hace

Abrumado por las críticas, renunció Justin Trudeau, el primer ministro de Canadá

Permanecerá en funciones hasta que se elija a su sucesor. También dejará de conducir el…

14 horas hace

La estabilidad de precios y las promociones bancarias levantaron las ventas minoristas un 17,7% en diciembre

La mayoría de las ventas se produjo en la segunda mitad del mes, tras el…

14 horas hace

La Mesa de Enlace de Córdoba enfrenta con dureza al gobierno: «Está asfixiando al sector»

El sector mediterráneo reclama urgentes medidas y se refiere al impacto de las retenciones y…

14 horas hace

Un piloto de los vuelos de la muerte fue beneficiado por Casación a pesar de violar la prisión domiciliaria

Alejandro Domingo D’Agostino, condenado por pilotear el avión que arrojó a las Madres de Plaza…

15 horas hace

Ingrid Pelicori: “Se desfinancia el teatro, el cine está parado y la TV ya no es una fuente de trabajo”

La actriz protagoniza “Sueño de dos” en la calle Corrientes junto a Manuel Callau, que…

16 horas hace

Implantes cerebrales, inteligencia artificial y respuestas sobre la materia oscura: qué esperar de la ciencia en 2025

El sitio de divulgación científica The Conversation analizó qué hay que tener en cuenta en…

19 horas hace

Adiós a Perry, el burro que inspiró al famoso personaje de Shrek

El animal murió a los 30 años tras luchar con una dolorosa enfermedad en las…

19 horas hace

Mitos y verdades de las dietas para desintoxicarse

Restrictivas y carentes de nutrientes, son planes alimenticios que ayudan a disminuir la culpa de…

19 horas hace